El sello Juan Pablos publica el texto, original de Elena Guiochins
Domingo 20 de marzo de 2011, p. 4
La compleja personalidad de la escritora Rosario Castellanos, quien en 1974 falleció electrocutada mientras fungía como embajadora en Israel, es la línea sobre la cual profundiza la dramaturga Elena Guiochins en su obra de teatro Prendida de las lámparas, la cual acaba de editar como libro el sello Juan Pablos.
Esta publicación ocurre luego de la exitosa temporada que tuvo la pieza entre octubre de 2009 y marzo de 2010 en el teatro El Granero, del Centro Cultural del Bosque, en montaje dirigido por Alberto Lomnitz y el cual fue protagonizado por las actrices Blanca Guerra, María Inés Pintado y Haydeé Boetto.
Una vez más, ese equipo se reunió la noche del viernes, pero ahora para participar en la presentación del mencionado volumen, acto que tuvo lugar, precisamente, en la librería Rosario Castellanos del Fondo de Cultura Económica.
Las actrices y el director escénico ofrecieron una lectura de una escena de esa obra, en la cual la voz de la desaparecida narradora, poeta, dramaturga, ensayista y diplomática se desdobla en tres para hablar de sí y sus obsesiones, sus miedos, contar pasajes de su existencia e ironizar sobre su persona.
Una de las grandes cualidades del texto de Elena Guiochins, según se resaltó durante la velada, es su habilidad para lograr que esas situaciones y experiencias interiores rebasen el ser de Rosario Castellanos y queden abiertas para que se refleje en ellas o incluso se las apropie quien se acerque a esta obra.
Sobre la naturaleza de este texto, se aclaró que, más que ser una biografía en la que se exalte el genio literario de la escritora chiapaneca, se pone de manifiesto la percepción que tiene un ser complejo y dotado de inteligencia y sensibilidad excepcionales.
Prendida de las lámparas, se dijo, es un pieza teatral en la que el personaje central revela algunas de sus fibras más sensibles a partir de la búsqueda obsesiva de su lugar en el mundo, por discernir el nivel de su soledad y el porqué de ese hueco con el que cada persona carga toda la vida.