Río de Janeiro, 20 marzo. Estados Unidos y Brasil deben ser socios igualitarios, afirmó hoy el presidente Barack Obama, en un discurso pronunciado en Río de Janeiro, donde alabó a esta nación sudamericana como una potencia mundial creciente y la puso como ejemplo de transición democrática para otros países.

Nuestras dos naciones no siempre estuvieron de acuerdo en todo. Y como muchas naciones, tendremos diferencias de opinión en el futuro. Pero estoy aquí para decirles que el pueblo estadunidense no sólo reconoce el éxito de Brasil, lo celebra, señaló Obama en su discurso pronunciado en el Teatro Municipal.

Afirmó que Brasil emergió tras décadas de subdesarrollo para convertirse en una economía poderosa y en una democracia floreciente que posee muchos valores compartidos con Estados Unidos. En ese sentido, pidió una unión con Brasil, no como un socio menor y uno mayor, sino como socios igualitarios, y comprometidos con el progreso que podemos lograr juntos.

Obama, quien habló al día siguiente de haber anunciado en Brasilia que autorizó una acción militar limitada contra el régimen de Muamar Kadafi en Libia, amparado en una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas –votación en la que Brasil se abstuvo–, puso a la democracia brasileña de ejemplo para las naciones de Medio Oriente que enfrentan rebeliones populares contra regímenes de facto.

Afirmó que Brasil, que vive una democracia plena y ha sacado en los últimos años a millones de personas de la pobreza, es ejemplo para los que creen que el sistema democrático obstaculiza el desarrollo.

El presidente llamó a los brasileños a fortalecer la amistad con los estadunidenses, visitó en la mañana la favela Cidade de Deus, en la periferia de Río de Janeiro, un barrio pobre liberado de traficantes de drogas por la policía.

Por primera vez, la esperanza está volviendo a lugares donde el miedo prevaleció por mucho tiempo, remarcó el jefe de la Casa Blanca.

Por otro lado, Obama presionó ante su par brasileña, Dilma Rousseff, en favor del avión de combate F-18 de Boeing en la disputa con la francesa Dessault Aviation, empresas entre las que Brasil decidirá una multimillonaria inversión para modernizar su fuerza aérea, informó la Casa Blanca.

En Chile, adonde Obama viajará, jóvenes universitarios chilenos marcharon por Santiago, junto a dirigentes del Partido Comunista, del Colegio de Profesores y grupos defensores de los derechos humanos para rechazar su visita, al tiempo que le demandaron que ofrezca disculpas por la intervención de su país en el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.