Ayer ocurrieron tres choques en la línea 3 del Metrobús, en distintos lugares y horas del día, lo que ocasionó que seis personas requirieran revisión médica en el lugar de los hechos y dos más tuvieran que ser trasladadas a un hospital para su valoración; se les dio de alta más tarde.

El primer percance ocurrió por la mañana cuando el conductor de un taxi dio vuelta prohibida a la izquierda sobre Eje 1 Poniente y Mosqueta, en la colonia Guerrero, delegación Cuauhtémoc.

El vehículo fue impactado en el costado del conductor por la unidad del Metrobús 443, por lo que la circulación quedó detenida casi media hora. Sin embargo, no se reportaron lesionados.

Alrededor de las 15 horas, otro auto intentó ganarle el paso al autobús articulado para dar una vuelta prohibida, pero fue impactado por la unidad del transporte público 451. Los hechos ocurrieron en el cruce de Cuauhtémoc y Viaducto Miguel Alemán, en la colonia Narvarte, delegación Benito Juárez.

El automóvil particular, una camioneta Windstar, era conducida por Román González, quien de acuerdo con testigos se atravesó hacia el Viaducto de forma intempestiva.

El chofer del Metrobús tuvo que frenar bruscamente, por lo que varios pasajeros requirieron atención médica en las ambulancias que llegaron. Una pareja de adultos con discapacidad tuvo que ser trasladada al hospital Magdalena de las Salinas.

El conductor de la camioneta fue detenido y trasladado a la octava agencia del Ministerio Público para deslindar responsabilidades. El accidente provocó caos vehicular en este cruce debido a las maniobras para retirar los vehículos y la llegada de ambulancias.

Alrededor de las 17 horas ocurrió el último choque, sobre Eje 1 Guerrero y la calle Moctezuma, en la colonia Buenavista. Un automóvil Clio cruzó por el carril confinado y fue embestido por la unidad 431 del Metrobús. El conductor del auto particular fue trasladado a un hospital.

El director del Metrobús, Guillermo Calderón Aguilera, calificó estos hechos de circunstanciales, pues en todos los casos la responsabilidad fue de los conductores al violar los señalamientos de tránsito, de acuerdo con los resultados de los peritajes.

A mes y medio de entrar en operación, suman 14 los incidentes menores o lamineros registrados en la línea, aunque se reforzará el operativo de seguridad a lo largo de los 17 kilómetros, en especial los 18 cruceros conflictivos.

No habrá tolerancia con quienes incumplan el reglamento de tránsito. Así que se harán acredores a multas y hasta la remisión del vehículo al corralón, sin considerar su presentación ante el Ministerio Público en caso de lesionados, señaló.

Mencionó que la obligación del organismo descentralizado es cuidar la seguridad de cerca de 80 mil personas que utilizan diariamente este medio de transporte, y un incidente provoca el retiro de la unidad para su reparación y abrir el intervalo de servicio de 2.5 a 5 minutos, lo cual provoca que aumente el número de personas en los andenes.