Miércoles 23 de marzo de 2011, p. 34
Puebla, Pue., 22 de marzo. Industriales de la tortilla encararon al secretario de Economía, Bruno Ferrari García de Alba, a quien acusaron de ignorar el precio de la tonelada de harina de maíz. En respuesta, el funcionario ofreció encarcelar a quien cometa abusos.
Ferrari puso en marcha el programa Mi Tortilla, en un acto durante el cual dijo que no es por medio de subsidios, sino del fomento a la competencia, como el precio de la tortilla se mantendrá bajo. Destacó que Puebla es el estado donde este alimento se vende más barato, mientras en Baja California es más caro: 15 pesos por kilogramo.
Al final del acto, en el cual lo acompañó el gobernador Rafael Moreno Valle, industriales de la masa y la tortilla se acercaron al funcionario y le dijeron que el programa está bien en el papel, pero no en la realidad
, pues en la central de abasto de la entidad se especula con el maíz y el precio de los demás insumos para la elaboración de tortilla se incrementan frecuentemente.
Bruno Ferrari respondió que eso no es posible
y que, con la participación de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, se firmó un contrato con proveedores de insumos a fin de mantener los precios estables.
Cruz Alonso replicó: Tengo facturas. La tonelada de harina del maíz me costó el 26 de febrero 6 mil 750 pesos, y el 28 de marzo subió a 8 mil 500. Está muy bonito el programa, señor, pero son muy altos los precios que nos dan a los productores. ¿Quién va a detener a las harineras?
El funcionario pidió: Si tiene una factura donde compruebe lo que me dice, tráigamela y le aseguro que metemos a la cárcel a esa gente. Nadie en el país da ese precio
.
Agregó que este año la Comisión Federal de Competencia ha registrado siete incrementos a la tortilla y los analiza para aplicar sanciones. También se investigan colusiones entre industriales y distribuidores en varios estados, a fin de poner obstáculos a algunos vivales que afirman que va a haber escasez del maíz
.
El funcionario explicó que con el programa Mi tortilla se busca que las tortillerías eleven sus ganancias de 10 a 42 por ciento y ahorren hasta 30 por ciento en gas y agua. Apuntó que debe promoverse un precio competitivo con apoyos a la producción y reducir costos de manera inteligente
en beneficio de los ciudadanos.
De nada sirve entregar subsidios para beneficiar a un sector específico, en perjuicio de todos los mexicanos. No es lo mismo hacer programas que generen empleos que hacer programas que administren la pobreza; eso es lo que tenemos que cambiar
, dijo.
Detalló en el país existen 85 mil tortillerias y molinos. De éstos, 10 mil se han beneficiado con el programa de capacitación y financiamiento Mi tortilla, señaló. En Puebla, añadió, hay unas 10 mil tortillerías, y de éstas mil 200 podrán inscribirse al programa federal para recibir cursos de capacitación, y créditos hasta de 140 mil pesos para renovar su equipo.