Toluca, Mex., 22 de marzo. El titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), Alfredo Castillo Cervantes, quien estuvo a cargo de la investigación sobre la desaparición y muerte de la niña Paulette Gebara Farah, deceso ocurrido hace exactamente un año, sostuvo este martes que la actuación de la dependencia no fue irregular, sino que existió un mal manejo mediático del caso, que dio lugar a incertidumbre y especulaciones.

El funcionario ofreció una conferencia de prensa en la cual anunció la consignación de la banda de secuestradores Los Aboytes. Interrogado sobre el caso Paulette, aseguró que todas las actuaciones del Ministerio Público y la resolución de la PGJEM al respecto se basaron en dictámenes internos y externos, los cuales avalaron que la muerte de la menor fue producto de un accidente.

El error mediático que pasó en el caso Paulette fue haber adelantado hipótesis, cuando faltaban algunas periciales, dijo Castillo. Además, cuestionó la actuación de su antecesor al frente de la PGJEM, Alberto Bazbaz, quien en su momento ofreció una conferencia de prensa en la cual hizo señalamientos carentes de pruebas.

Faltaban, dijo, los resultados de pruebas periciales que la Procuraduría General de la República practicó, y los que hizo la Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés). Eso fue lo que generó una mayor incertidumbre en la opinión pública. Si en su momento no se hubiera expresado ninguna hipótesis y simple y llanamente se hubieran esperado a los resultados periciales, no hubiera pasado esto, destacó.

Castillo Cervantes afirmó que la muerte de Paulette Gebara Farah es para la dependencia un caso cerrado y determinado, y no existen elementos para abrirlo nuevamente.