La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) investiga si las autoridades penitenciarias de la ciudad violaron el derecho a la salud de los internos del Reclusorio Sur al permitir u omitir los controles necesarios para evitar el ingreso de drogas en dicho penal, informó la segunda visitadora del organismo, Rosalinda Salinas Durán.

Asimismo señaló que en el motín ocurrido el pasado 18 de marzo en esa cárcel, la comisión tiene ubicados a 44 reos que participaron de manera directa en el disturbio, incluso algunos de ellos como instigadores del mismo, por lo que, dijo, no es cierto que no estén identificados, como aseguró la Subsecretaría del Sistema Penitenciario al presentar la denuncia correspondiente ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.

En entrevista, dijo que la investigación que realiza la CDHDF en torno a esos hechos, que dejaron un saldo de 16 internos y un custodio lesionados, está enfocada en las consecuencias que tiene en la salud de los presos que en un centro de reclusión pueda haber uso y consumo de drogas, por lo que se indaga la presunta participación de custodios en el ingreso de estupefacientes en ese centro.

Reiteró que el motivo del motín fue la falta de drogas dentro del penal, pues durante el recorrido que realizó el personal de la comisión en ese sitió la consigna de la mayoría de los aproximadamente 200 reos que de alguna manera participaron en la riña era: queremos mota.

En ese sentido, Salinas Durán se manifestó por que la pena privativa de libertad, tomando en cuenta las condiciones de los reclusorios, no sea administrada solamente bajo la perspectiva de la readaptación social, a través de la educación y la capacitación para el trabajo, sino también de la desintoxicación de quienes presentan problemas de adicciones.

Afirmó que si bien las autoridades penitenciarias implementan programas de rehabilitación, con el apoyo de fundaciones como Oceánica y Montes Fénix, éstos son insuficientes para atender a la población con esta problemática.