Tras aceptar la renuncia del titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Arturo Chávez Chávez, el presidente Felipe Calderón anunció que en breve enviará a la Cámara de Senadores una solicitud para que ratifique en ese cargo a la actual jefa de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en  Delincuencia Organizada (SIEDO), Marisela Morales Ibáñez. La petición llegó anoche a la sede senatorial.

En tanto, anunció que queda al frente de la PGR, como encargado de despacho, Jorge Alberto Lara, subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales, hasta que se ratifique la propuesta del Ejecutivo.

Así se concretó la renuncia de un funcionario que tuvo un efímero paso por la PGR, en un país sacudido por el fortalecimiento de las organizaciones de narcotraficantes, que ha llevado al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a lamentar la frustración que el combate a la delincuencia le ha provocado a Calderón.

Chávez Chávez argumentó que renunciaba para atender temas de carácter estrictamente personal e impostergable, y Calderón admitió la dimisión.

Un soldado de a pie

El efímero paso de Chávez Chávez por la PGR fue previsto en la embajada de Estados Unidos en México desde el 15 de septiembre de 2009. Apenas una semana después de conocerse que fue propuesto por el Presidente y aún sin el aval del Senado, el futuro procurador fue definido por el embajador Carlos Pascual de forma lapidaria ante una designación inesperada y en aras de explicar a su gobierno apuntó dos hipótesis descalificatorias del funcionario:

Calderón, molesto con el rechazo priísta a sus primeras selecciones, decidió impulsar un soldado de a pie del PAN, leal y con experiencia.

En otro escenario, Pascual aventuró que en realidad la propuesta presidencial pretendía enviar una pieza sacrificable para nominar a otras cartas: el actual secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, y Juan Miguel Alcántara Soria.

Antes del ingreso formal de Chávez Chávez al gabinete, en los cables difundidos por Wikileaks y publicados por La Jornada (9 de marzo), la sede diplomática lamentaba la pérdida de Eduardo Medina Mora, al que consideraba pieza importante al frente de una dependencia clave en el combate al narcotráfico.

Sin desestimar las advertencias de organizaciones de derechos humanos sobre el paso de Chávez Chávez como procurador de Chihuahua y sus omisiones, que provocaron el incremento de los feminicidios en Ciudad Juárez, la sede diplomática advertía de la escasa comunicación que tenía el ex procurador con los grupos defensores de garantías.

Anuncio en Los Pinos

Originalmente previsto para el miércoles y frenado por la polémica con el PRI por las alianzas en el estado de México, tras la visita de la dirigencia nacional panista a Los Pinos, desde temprano se conoció que al mediodía de este jueves Calderón oficializaría la renuncia de Chávez.

Con el argumento de que debe atender temas de carácter estrictamente personal e impostergable, el procurador general de la República, Arturo Chávez Chávez, presentó su renuncia al presidente Felipe Calderón en la residencia oficial de Los PinosFoto Guillermo Sologuren

La noche del miércoles, algunos subprocuradores más cercanos ya conocían su renuncia, y en las primeros minutos de ayer se ordenó a los funcionarios de mayor rango –fiscales, subprocuradores y directores de área– que suspendieran todas sus citas porque tendrían un desayuno con el titular.

En la reunión, Chávez Chávez se despidió de sus colaboradores, explicó los motivos de su renuncia y pidió discreción hasta que el Presidente hiciera el anuncio. Horas después, Calderón le agradeció su labor, que calificó de fundamental para hacer prevalecer el estado de derecho y hacer prevalecer la seguridad de nuestras comunidades.

El jefe del Ejecutivo aseguró que bajo la gestión de Chávez ha sido posible llevar ante la justicia a los principales dirigentes de las organizaciones criminales, así como decomisarles armamento, vehículos, propiedades y dinero ilícito.

Asimismo, reconoció el papel desempeñado por el procurador en la modernización de la PGR y en la elaboracion de un paquete de iniciativas de ley en materia de seguridad, como la de la policía con mando único, el lavado de dinero y la extincion de dominio.

Hacer una institución confiable

Calderón sostuvo que si el Senado confirma a Morales Ibáñez como titular de la PGR, la funcionaria deberá coadyuvar en el combate de los delitos que más lastiman a la sociedad, apoyar a las procuradurías estatales y buscar la obtención de los más altos estándares de profesionalismo en la dependencia, en tiempos en que México está luchando por construir un estado de derecho.

Además, deberá completar la labor de depurar la PGR, la Policía Ministerial y fortalecer a la SIEDO, lo cual es un compromiso que asumimos en el Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad. Dijo también que Morales deberá profundizar en el papel estratégico que ha tenido la procuraduría, en particular en la lucha contra el crimen organizado.

El objetivo es hacer a la procuraduría una institución confiable para todos los mexicanos. De ser ratificada, insisto, como reponsable de la procuración de justicia federal, deberá trabajar para abatir la impunidad y demostrar que la violación de la ley tiene un alto costo: quien infringe la ley debe ser castigado.

El Presidente indicó que el papel de la nueva procuradora será crucial para consolidar a México como el país de leyes que los mexianos quieren.

Calderón sostuvo que desde la SIEDO, Morales posibilitó golpear a las organizaciones criminales, siempre con base en la ley, lo que le permitirá desempeñar el nuevo cargo, pues además tiene reconocimiento nacional e internacional.

Enlaces:

Los cables sobre México en WikiLeaks

Sitio especial de La Jornada sobre WikiLeaks