El presidente Felipe Calderón anunció que solicitará a todos los gobiernos estatales que, junto con las instancias federales, dediquen el mes de abril para realizar exámenes de control de confianza a los mandos de las procuradurías y las secretarías de seguridad. Ello implicaría examinar procuradores, secretarios subsecretarios, subprocuradores, jefes policiacos y responsables de las unidades antisecuestro: no veo razón para esperar más, comentó el mandatario.

Al encabezar la asamblea de la Confederación de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo, Calderón respondió así a la demanda de los empresarios de combatir al crimen organizado, enfatizando su petición de frenar a la piratería.

El mandatario destacó que las bandas delincuenciales han expandido sus ámbitos de operación más allá del narcotráfico para abarcar el secuestro, la venta de mercancía robada o la piratería, de ahí la importancia de combatirlas.

El Presidente aprovechó para respaldar las negociaciones en torno a la enmienda a la Ley Federal del Trabajo, celebrando la enorme responsabilidad de centrales obreras, que están asumiendo los retos de una reforma laboral. Quizá no sea del gusto de todos (pero) dicen que lo que refleja una buena negociación no es del gusto de nadie, porque eso implica que todo mundo puso algo sobre la mesa.

Calderón Hinojosa se refirió a otro tema sensible para los empresarios: el financiamiento. No es justo que los créditos que demandan las empresas estén en manos del especulador o el agiotista que cobran tasas de interés de hasta 8 o 10 por ciento mensuales a las pequeñas y medianas empresas. Es necesario mejorar los sistemas de financiamiento para hacer más competitivas a las empresas.

Sin embargo, dijo que en este sexenio el costo del financiamiento se ha reducido, aunque todavía de manera insatisfactoria, al pasar de tasas de interés cercanas a 30 por ciento en 2007 al 19 por ciento el año pasado.

En su discurso, el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servitur), Jorge Enrique Dávila Flores, demandó avanzar en las reformas hacendaria y laborales que mejoren los niveles de competitividad de las empresas. Se requiere una reforma hacendaria que simplifique y haga eficiente la recaudación, ofrezca seguridad jurídica y pugne por ampliar la base de los segmentos de la economía que hoy disfrutan de servicios públicos y que no aportan recursos.

Actualmente, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía en México, existen 2.1 millones de empleadores. Sin embargo, dados de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) sólo hay 838 mil empresas, lo que significa que existen 1.3 millones de empleadores en la informalidad. Veamos esto como una oportunidad para fortalecer las finanzas públicas sin aumentar los impuestos.

En materia laboral, se pronunció por una reforma que permita incrementar el empleo y la productividad del trabajo, garantice ingresos y empleos, aumentando la competitividad. Dijo estar confiado en que con los legisladores, el apoyo de las centrales obreras y organizaciones empresariales, así como con el respaldo del gobierno federal, en breve se apruebe la reforma laboral.

Tras destacar el combate a las bandas delincuenciales en el que se ha empeñado el gobierno federal, demandó que en la estrategia del combate al crimen organizado que se ha emprendido se debe enfrentar con la misma firmeza y decisión a todos los grupos que producen, distribuyen y comercializan productos ilegales.

Calderón respondió a estas demandas al subrayar que en esta administración se ha decomisado 88 millones de prendas de vestir ilegales, lo que representa 30 veces más que en todo el sexenio anterior.

El dirigente empresarial pidió a los medios de comunicación respetar los principios y criterios editoriales suscritos en el Acuerdo para la cobertura informativa de la violencia. Esto permitirá poner en su justa dimensión los hechos de violencia en el país y eliminar los fines propagandísticos de los grupos criminales.