Cuernavaca, Mor., 28 de abril. Desde diciembre de 2009, cuando marinos dieron muerte a Arturo Beltrán Leyva en esta ciudad, 150 muchachos morelenses han sido ejecutados, informó Jessica Rivera, integrante de la Red por la Paz y la Justicia, al iniciar el congreso Los jóvenes en la emergencia nacional.

Tenemos sus nombres y apellidos, sus familiares se han acercado a esta organización para denunciar que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) los acusó de pertenecer al crimen organizado y tras esa acusación no se investigó ni se castigó a los responsables de sus muertes, dijo en la sede del Sindicato Mexicano de Electricistas, donde se desarrolla el encuentro.

Los participantes iniciaron el congreso con la lectura de una carta enviada por el poeta Javier Sicilia –cuyo hijo Juan Francisco y seis personas más fueron localizados muertos hace exactamente un mes en esta ciudad– en la que los felicitó de que se reúnan para buscar los mejores caminos que nos ayuden a salir de este infierno cotidiano que vive México.

Los reunidos –en su mayoría estudiantes de la Universidad Autónoma de Morelos y de colectivos culturales, sociales, campesinos y obreros– señalaron que su principal preocupación es que en México no hay futuro para la juventud, porque se le está asesinado en el presente.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en tres años México tendrá el índice más alto de población juvenil, y resulta preocupante cuando la única promesa que se le ha hecho a esa enorme masa es engrosar las filas de la delincuencia organizada, o sumarse a las estadísticas de levantados y asesinados, o bien a la cuenta de falsos positivos o de daños colaterales, agregó Rivera.

Por los tiempos difíciles que vive México, hoy las autoridades de los tres niveles quieren imponer la palabra muerte como sinónimo de juventud, remató.

Aseveró que los jóvenes quieren recuperar la esperanza y reivindicar su derecho de vida, por lo que organizaron este congreso para reflexionar sobre la muerte de miles de mexicanos en los cuatro años recientes, con las mesas de trabajo militarización y violación de la soberanía nacional, violencia e impunidad; narcotráfico; vida digna; arte y cultura, y educación.

En las seis mesas participan jóvenes provenientes del Distrito Federal, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Puebla, Chihuahua, Sonora, Coahuila y Chiapas. Los trabajos concluirán el viernes.

En su misiva, Javier Sicilia señala: Ayer, y desde hace 30 días (ustedes) han dado lecciones de solidaridad que son una luz en la oscuridad. Que han sido el corazón colectivo donde mitigar mi dolor, mi angustia, mi coraje, mi indignación ante el mayor dolor que un padre puede tener en la vida.

El colaborador de La Jornada Semanal y de la revista Proceso agregó: Qué mejor que sean ustedes, los jóvenes, quienes hoy se reúnan para buscar los mejores caminos que nos ayuden a salir de este infierno cotidiano, aunque les advirtió que el camino para lograrlo va a ser largo y difícil, pero aseguró que es importante que en Cuernavaca ya empezaron a caminar juntos.

Sicilia hizo otros comentarios, entre ellos sobre los incendios forestales y la incapacidad del gobierno de tener un solo avión cisterna para combatirlos, cuando invierte 40 mil millones de pesos en el Ejército y las policías.

Antes, en una entrevista de radio, lamentó que a un mes de que encontraron a su hijo sin vida y a otras seis personas, la PGJE no haya dado con el paradero de ninguno de los que participaron en ese mutihomicidio, y peor aún que el fiscal morelense siga en su cargo pese a su ineficacia ante ese caso y otros 400 que han sucedido en la entidad desde diciembre de 2009.