Sábado 30 de abril de 2011, p. 25
Más de la mitad de los israelíes se muestran favorables a que su gobierno reconozca un Estado palestino si la comunidad internacional y Naciones Unidas lo hacen el próximo septiembre a petición del presidente de la ANP, Mahmoud Abbas.
Según sondeo publicado por el diario de mayor tiraje, Yediot Ajaronot, 48 por ciento de los israelíes consideran que el premier Benjamín Netanyahu debe reconocer el Estado palestino en línea con el comportamiento del resto de países, salvaguardando la jurisdicción israelí a los grandes bloques de asentamientos
en Cisjordania.
Se trata de tres conjuntos de asentamientos, dos próximos a Jerusalén, en los que residen decenas de miles de judíos y que en las negociaciones pasadas mostraron disposición a cederlos si a cambio les canjeaban igual cantidad de tierras del territorio de Israel.
Mientras, 41 por ciento insta a oponerse con toda contundencia, incluso al precio de un choque con la ONU
, y el 11 restante no tiene aún una opinión formada.
En la presunción de que este porcentaje (el 11) se divida a partes iguales entre ambas opiniones, o en la misma proporción, la única conclusión es que la mayoría de los israelíes apoya el reconocimiento del Estado palestino
, escribe la comentarista Sima Kadmon.
La encuesta fue realizada con vistas a los viajes que Netanyahu tiene previstos a Inglaterra y Francia, la semana que viene, y a Estados Unidos en tres semanas, cuyo objetivo es intentar convencer a esos países de que no respalden la exigencia del presidente Abbas de llevar el caso palestino a la ONU de forma unilateral en el próximo periodo de sesiones.
Paralizado el proceso de paz desde hace meses, los palestinos quieren ver cumplida la promesa del presidente Barack Obama, de que en septiembre de 2011 se declare su Estado, a pesar de que Israel se opone tajantemente y nacería bajo ocupación.
El pasado miércoles el presidente Abbas dio un paso gigantesco hacia ese objetivo al conseguir un acuerdo preliminar con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) que, de concretarse, reunificaría Cisjordania y Gaza bajo un mismo gobierno por primera vez desde 2007.