Cruz Azul desea dejar atrás la frustración por los títulos que han quedado por el camino, afirmó José de Jesús Corona, quien aseguró que el equipo pondrá todo en la cancha frente al Atlante.

Sus declaraciones son al margen del reto que planteó el presidente azulgrana, José Antonio García, en el sentido de que su equipo se topa con un rival a modo en el partido de cuartos de final, esta noche en el estadio Azul.

Si bien los Potros nos complicaron en el torneo regular, sabemos que debemos mejorar en muchos aspectos para sobrepasarlos, comentó el arquero tras el cierre de preparación ayer en La Noria.

Respecto de los comentarios surgidos del alto mando del equipo que superó a Cruz Azul en la segunda fecha del torneo regular, Corona señaló: “Es respetable, hay que tomarlo de quien viene. Nosotros tenemos un presidente (Guillermo Álvarez) que no anda con habladurías y que respeta a todos los rivales, además de ser un dirigente con mucha clase.

Nosotros como jugadores vamos a hacer nuestro trabajo dentro de la cancha. No se gana hablando. Donde se debe hablar es en el terreno de juego y esperar al partido para saber quién es el mejor, anotó el portero celeste.

Se mostró tranquilo, en el sentido de que La Máquina será uno de los ocho equipos con posibilidad de coronarse, pero esta vez con un poco menos de presión por no llegar como líder a la liguilla.

Para Javier Orozco la historia adversa de Cruz Azul en la definición por los títulos no cuenta, pues siempre tratamos de hacerlo bien, pero a lo mejor se nos están achacando algunos torneos anteriores en los que no se consiguió el título. Venimos cargando con eso desde hace algún tiempo.

En ese sentido, subrayó que es necesario superar el pasado: Hay que vivir el presente y por supuesto que esta es una buena oportunidad para que el equipo esté bien.

Horacio Cervantes marcó su despedida preventiva de La Máquina. Dedicó casi los 15 minutos de su intervención en la sala de prensa a reconocer los errores con los que pudo haber afectado al equipo durante el torneo, en el que tuvo dos tarjetas rojas.

Recalcó que asumirá las consecuencias, desde no alinear esta noche, hasta la no renovación de su contrato, que concluye al final del Clausura 2011.

Estoy consciente del reciente partido (ante Chivas), justa o injusta expulsión, lamentablemente perjudiqué otra vez al equipo. Si me toca participar, haré lo mejor, o si debo estar en la banca o en la tribuna, pues igual, manifestó Cervantes en tono resignado.