Esa medida no debe hacerse sola, destaca BBVA Bancomer ante la sugerencia de la OCDE
Los recursos que el gobierno destina a ese renglón deben ser aplicados de manera selectiva, para que realmente beneficien a los sectores de menores ingresos, sostiene un estudio del banco
Jueves 19 de mayo de 2011, p. 21
Retirar el subsidio al consumo de gasolina sin disponer previamente de acciones que atenúen el efecto de esas medidas en el bienestar de la población es una medida incompleta, aseguró este miércoles BBVA Bancomer, principal intermediario financiero del país.
Retirar el subsidio a la gasolina no es el tipo de medida que debe hacerse sola, sino que debe ser fruto de una reforma integral
, afirmó Julián Cubero, jefe de estudios macroeconómicos de BBVA Research, el área de estudios económicos del grupo financiero. No se puede tocar el subsidio (al consumo de gasolinas) sólo por tocarlo
, sostuvo el especialista.
El martes pasado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) aseguró que el subsidio al precio de la gasolina es ineficiente
y que el gobierno mexicano debe acelerar
el proceso para eliminarlo. El país necesita una estrategia contundente para eliminar los subsidios a la energía y encontrar mejores formas de proteger a los pobres
, destacó en la ocasión José Angel Gurría, ex secretario mexicano de Hacienda y director general de la OCDE, en un comentario escrito que acompañó la publicación del estudio en que el organismo propuso acabar con la subvención al consumo de combustible.
Según la OCDE, el subsidio del gobierno al consumo de gasolina y otros energéticos requiere cada año recursos fiscales por el equivalente a 1.5 puntos del producto interno bruto, unos 190 mil millones de pesos.
Los usuarios de automóviles en México consumen en conjunto más gasolina de la que el país es capaz de producir. El diferencial entre la demanda del combustible y la producción nacional es cubierta por el gobierno federal con importaciones, generalmente al precio de referencia de Texas. El efecto del alza en el precio internacional del petróleo, que ha rebasado 115 dólares por barril, sobre el precio de referencia de la gasolina es cubierto por el gobierno federal a través de un subsidio.
Los precios internos de la gasolina se incrementan cada mes, a razón de 8 centavos por litro, que no compensan en su totalidad el alza en el costo internacional del combustible.
En la presentación del estudio Situación México, Julián Cubero dijo ayer que los recursos que el gobierno federal destina a subsidiar el precio de la gasolina deben ser empleados de manera focalizada
, es decir, selectiva, para que realmente beneficien a las personas de menores ingresos del país, argumento similar al expuesto el martes por la OCDE. Está más que demostrado que los subsidios generalizados terminan siendo regresivos (que benefician al estrato de mayor ingreso), en este caso al dueño del auto más grande o de lujo
, expresó.
Interrogado sobre la posibilidad de que el retiro del subsidio al consumo de gasolina tenga un efecto en el costo de otros productos como los alimentos, y afecte al bienestar de las familias, Cubero respondió que en economía no hay nada gratis
. Se puede, dijo, compensar a las familias para que no sean afectadas por alzas de precios relacionadas con el retiro del subsidio a la gasolina, pero los precios deberían reflejar lo que cuesta
el combustible.
El alza en el precio internacional del petróleo, que este año rondará 90 dólares por barril, según calculó BBVA, dotará al gobierno de recursos adicionales a los previstos por 1.4 puntos del producto interno bruto. Un punto equivale a 130 mil millones de pesos, poco menos del monto representado por el subsidio al consumo de gasolina.
La transferencia de recursos para subsidiar el consumo de gasolina ha contribuido a reducir el impacto inflacionario de la subida de precios internacionales de petróleo
, señaló el estudio.