La feria de Frankfurt es un escaparate para el entedimiento entre civilizaciones
Facilitar el diálogo de los pueblos, finalidad del encuentro editorial que dirige el promotor
Difunde aquí la presencia de Alemania como invitado de honor de la FIL de Guadalajara
Sábado 21 de mayo de 2011, p. 5
El director de la Feria de Libro de Frankfurt, la más importante de su tipo en el panorama internacional, Juergen Boos, refrendó ayer en México al libro, la lectura y la cultura entre los pocos instrumentos que le quedan a la humanidad para enfrentar la hegemonía del sistema neoliberal y la globalización.
Al respecto, destacó que uno de los principales empeños de ese encuentro editorial es mantenerse como uno de los pocos espacios de libertad absoluta que prevalecen en el mundo.
Boos visita México para promover la presencia de Alemania como país invitado de honor de la versión 25 de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, que tendrá lugar en esa ciudad el próximo diciembre.
En entrevista con La Jornada, el promotor cultural se refirió a la influencia y el peso político de la feria de Frankfurt y destacó que ésta tiene como misión, entre otros aspectos, servir de plataforma para que las diferentes culturas del planeta se encuentren, conozcan y entiendan.
Es un deber muy alto, si no, serían necesarias las guerras. Los pueblos y las culturas tienen que conocerse, hablar, entenderse, y uno de nuestros fines es posibilitar todo eso.
Aceptó que el rango de influencia de ese encuentro cultural y mercadotécnico es un tanto limitado, como de hecho consideró que es el de la Organización de las Naciones Unidas.
Sin embargo, destacó que para tratarse de una industria pequeña, en comparación con la bélica y la de salud, la rama del libro sí ejerce un poder importante a escala mundial, al influir en las personas mediante el acceso a la información y el conocimiento: Recordemos que vendemos ideas, no autos
.
Arte para sacar traumas
Entre otros aspectos, Juergen Boos habló del grado de independencia que en términos políticos mantiene la feria de Frankfurt y, como ejemplo, recordó que en años pasados logró tener como invitados de honor a escritores y representantes del ámbito editorial de China y Turquía, no obstante la oposición de ciertos sectores por causas políticas.
Fue una experiencia muy interesante, porque allí hay temas importantes, como la censura. Personas que son perseguidas por el gobierno no pueden viajar, actuar ni hablar libremente. Entonces, lo que hicimos fue abrir el espacio y discutir esos aspectos; que no sólo las personas de un país, sino del mundo, vieran cuál es la situación, por ejemplo, en China
, dijo.
Respecto del caso de Turquía, resaltó que mantuvieron firme la invitación a pesar de que hubo voces que criticaban el hecho debido al asesinato de un periodista armenio en ese país.
Respondimos que no invitábamos a un gobierno, sino a los escritores y editores que los publican. Un aspecto interesante es que en esa edición de la feria (Orhan) Pamuk (Premio Nobel de Literatura 2006) criticó al presidente de su país que estaba sentado en primera fila, delante de todos los medios y de cientos de personas. Eso es lo que realmente tiene sentido, que la feria es una plataforma para hablar al mundo entero.
De la relación con la FIL de Guadalajara, Juergen Boos destacó el apoyo que recibió desde su nacimiento por parte de la de Frankfurt, así como el contacto y la cooperación permanentes que existe entre ambas.
A pregunta expresa, rechazó que la violencia que prevalece en México sea un tema que cause intranquilidad en la delegación de editores, escritores y artistas alemanes que vendrán a la FIL de Guadalajara.
“Claro que nos enteramos por las noticias de lo que ocurre aquí, pero es un problema que para nosotros está a la misma altura de la tragedia por el terremoto y el tsunami en Japón”, aseveró.
“Me llama la atención que en los más recientes años no se ha traducido al alemán mucha de la nueva literatura producida en México, por lo cual la violencia no es un tema que haya invadido el ámbito de la literatura alemana.
En la literatura, las cosas son diferentes en contraste con las noticias. A través de ella, los países sacan sus traumas, como Alemania con la Segunda Guerra Mundial. El de México es ahora la violencia.