Los Ángeles, 29 de mayo. La segunda parte de la exitosa comedia ¿Qué pasó ayer 2?, de Todd Phillips, llegó el fin de semana a las salas de México. Esta vez, los cuatro amigos –Bradley Cooper, Zack Galifianakis, Ed Helms y Justin Bartha– se embarcan hacia Tailandia en el viaje de despedida de soltero de Stud (el dentista).

Phillips quiere repetir en esta segunda versión el éxito taquillero de 2009, que no sólo se convirtió en la comedia para adultos más exitosa de todos los tiempos, con casi 468 millones de dólares recaudados en taquilla, sino que ganó un Globo de Oro como mejor comedia.

Después del fuerte resacón de Las Vegas, Stud decide realizar una escapada más segura en el país asiático, sin alcohol, para celebrar sus últimos días de soltería. Sin embargo, las cosas salen al revés, tras sucumbir a una cerveza en botella sellada y despertar con el hermano menor de Stud desaparecido.

Así da comienzo una nueva serie de aventuras absurdas con elementos nuevos, como un dedo amputado, el pelo rasurado de Galifianakis (el cuñado gordito en la primera entrega), el tatuaje en el rostro del dentista y un mono en pantalón de mezcilla fumando, entre otros. Y como era de esperar, también se repiten algunas situaciones disparatadas, como la del bebé extraviado de la primera entrega.

Bangkok, apuesta ambiciosa

Sabíamos que nos teníamos que atener a ciertos principios de la película, confiesa Cooper, quien regresa en el papel de Phil, el líder del grupo. Queríamos que algunos aspectos que nos encantaron de la película pasada estuvieran en ésta, pero en un contexto fresco y completamente nuevo. La idea de Todd de situarla en Bangkok hizo que la apuesta fuera más ambiciosa. Tuvimos una persecución descomunal en automóvil, motocicletas, disturbios... Hay mucha acción, añade.

Asimismo, la cinta volverá a contar con la presencia del boxeador Mike Tyson, quien se interpretará a sí mismo o por lo menos figurará con su famoso tatuaje facial en el rostro de Helms, según se observa en el último tráiler.

Hace poco se informó que la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos tuvo que retirar uno de los avances presentados en algunos teatros, ya que simulaba escenas de sexo oral de Crystal, un mono capuchino, con Galifianakis. Por si fuera poco, el director recibió críticas del grupo de defensa de los derechos de los animales PETA por la utilización del animal, que fuma en la cinta. Phillips explicó que todo se manejó con efectos especiales.

Crystal no fuma; de hecho odia cualquier tipo de humo, aseguró el entrenador del simio, Tom Gunderson. Éticamente, ni Todd ni yo, que amamos a los animales, habríamos dejado que sostuviera ni que fumara un cigarrillo. El humo, al igual que la parte encendida del cigarrillo, fue creado por el supervisor de efectos especiales Robert Stadd, explicó.

En cuanto al guión, esta vez Phillips ha recurrido a Craig Mazin y a Scott Armstrong para que lo ayudaran. Tailandia en sí es un lienzo enorme, agrega Mazin.

Warner no ha escatimado en gastos publicitarios y, con el tirón de la primera, no es de extrañar que el resultado en taquilla vuelva a ser tan escandaloso como las aventuras de sus protagonistas.