uapos, carismáticos, simpáticos y gozosos de la fama que como golpe de suerte les cayó cual espejo de su mismo nombre, a inicios de los dosmiles, como para serles endilgada una bandera que ellos no pidieron, como líderes de una generación desbalagada, ya ni siquiera irónica sino inmediata, sucia, distorsionada, al filo del 11 de septiembre de 2001, The Strokes mueven un dedo y las multitudes están al pendiente. Y ahora que se ha dado la noticia de que por tercera vez visitarán México dentro del festival Corona Capital, al lado de la sorpresa de la década, la despampanante agrupación inglesa Portishead, la conmoción no es menor, a pesar de estar editando un álbum que ha excitado a muchos, pero ha decepcionado a otros: Angles (2011), su cuarta producción.

Desde la portada fosfo-retro, el mensaje es claro: new wave, pop, años 80. El garage-punk de bajo registro quedó atrás para, a cinco años del First impressions on Earth (2006), darle un giro a su fórmula, ya instalados en el aparador de lo más fashion, lo más in. La voz barítona de Julian Casablancas sigue siendo cálida, aunque en la mezcla ya no está escondida sino al frente, con una claridad pop que se halla a la par de la limpia batería de Fabrizio Moretti, menos embarrada, y la presencia melódica de las guitarras sin fuzz de Nick Valensi. Los repentinos arreglos electro parecieran provenir del disco solista de Casablancas (Phrazes from the Young, 2009). Simplemente, los Strokes se movieron hacia otro lado, sin dejar de sonar a ellos (Under cover of darkness, Machu Picchu, Taken for a fool…), con el desparpajo y simpleza que los caracteriza: jamás han sido ambiciosos, lo suyo es lo directo, el corazón estrujado, las vivencias inmediatas, decepcionadas.

Quizás el quinteto neoyorquino no parta cráneos como antes, sin embargo su identificación con la chaviza sigue incólume cual iconos que son ya, y punto a favor es el riesgo que corren por caminos inexplorados como en You’re so right, Games, Call me back o Gratisfaction. Angles se siente como un disco de transición, no se sabe adónde, que mira desde distintas esquinas, un tanto incierto, no por ello menos fresco y desfachatado.

Si bien Portishead será el plato mayor por mucho, por ahora sonriamos con este entremés dulce y liviano, aun así apetitoso. The Strokes actuará el 15 de octubre en la Curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez; preventa Ticketmaster: 15 y 16 de junio.

Botellita, Fangoria, Robota, Caligaris

Viernes 10: 1. Viernes 10 y domingo 12: el músico y compositor inglés Michael Nyman, influenciado por Mozart y el folk europeo, afamado por su estilo minimalista, repetitivo y cortante, conocido por musicalizar varias películas del director Peter Greenaway, entre otras cintas, ofrecerá un concierto a piano solo, con temas de los filmes Wonderland, Gattaca, The end of the affair, The piano, The diary of Anne Frank y A propos de nice; serán proyectados fragmentos fílmicos de Jean Vigo y el mismo Nyman. Sala Nezahualcóyotl (Centro Cultural Universitario), 20 horas, $200 y $300. 2. Botellita de Jerez presenta el chou De tripas, cuajo y corazón. Teatro de la Ciudad (Donceles 36, Centro), 20 horas, $100 a $250. 3. Fangoria. Con su electropop kitsch, Alaska promueve El paso trascendental, del vodevil a la astracanada (2010), con sus mayores éxitos, ya sea con Dynarama, como solista o con el mismo Fangoria (Nacho Canut). Metropólitan (Independencia 90, Centro), 20 horas, $311 a $1200. 4. Robota, enorme electro-punk futurista, y el pop oscuro de Yeshua Elastik. Imperial (Álvaro Obregón 29, Condesa). 22 horas, $100.

Sábado 11: 1. Friendly Fires. A bailar con ondita: este trío inglés le pegará a los teclados y los beats, mientras promueve su segundo disco Pala (2011): encenderán con sus ánimos disco-dance rock; bailongo hipster, fresón, pero contagioso. Six Flags (Km 1 Picacho-Ajusco), 21 horas, $311 a $711. 2. De Argentina, Los Caligaris y su fusión ska-cumbia-reggae-rock. También: K-chiporros y Maskatesta. José Cuervo Salón (Andrómaco 17). 20 horas, $300. 3. ¡Bullanga! El animado gitano-western de Liber Terán; también: Pilaseca y Los Músicos de José. Pasagüero (Motolinia 33, Centro). 21 horas, $100. 4. Rock lunático con Descartes a Kant, Hong Kong Blood Opera, entre otros. Uróboros (Madero 20, 6º piso, Centro). 21 horas, $60. 5. El pop experimental de URSS bajo el árbol; también: Real Durango y No Lucie. Atlántico (Uruguay 84, Centro). 21 horas, $70. Más recomendaciones: www.patipenaloza.blogspot.com.

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