Annecy, Francia. Con gatos filosóficos como los de Le Cat du Rabbin, música sensual como en la española Chico y Rita o imágenes visuales poderosas, como las de The Prodigies, Europa busca situarse en el mercado del cine animado con filmes que se apartan radicalmente de los estadunidenses. El Festival de Cine de Animación de Annecy, que reúne desde el lunes a millares de profesionales de la animación del mundo entero, constituye una plataforma privilegiada para comparar las producciones europeas con las de Estados Unidos, principal productor de películas animadas, único sector de la cinematografía mundial en crecimiento. Todos los filmes animados, de donde vengan, serán juzgados por los estándares de las películas de DreamWorks o Pixar, los dos grandes estudios de animación estadunidenses, señala el británico Tim Wescott, de His Screen Digest. “Sobre todo, si esas películas abordan la misma fórmula –comedia, dirigida a todas las edades–, que ha demostrado ser un éxito de taquilla en el mundo entero”, notó. En general, (las producciones no estadunidenses) empalidecen en esa comparación, observó, y subrayó que muchos filmes de animación europeos que han intentado seguir la fórmula estadunidense –con mucho menos recursos financieros y técnicos que de los que el disponen los multimillonarios estudios de Hollywood– no han cosechado el éxito que esperaban. Por eso, los países europeos, principalmente Francia –primer productor de filmes de animación en Europa– están explorando otras fórmulas, menos convencionales que los que ofrece Hollywood.