La lectura de poesía y de grandes obras desde la infancia fomenta la formación de seres íntegros, autónomos e independientes, capaces de pensar y de tener un corazón abierto al mundo, aseguró el escritor argentino Jorge Luján.

El autor, quien presentó el sábado pasado su libro más reciente, Esteban y el escarabajo, señaló que durante décadas se ha subestimado la capacidad de los niños, al ofrecerles como lectura textos de rimitas fáciles.

Recordó las palabras de diversos editores que le propusieron escribir cuentos en lugar de poesía, porque ésta no se vende. Durante 13 años no encontré editor para mis libros, no pude ceder a la tentación de escribir poesía, relató en entrevista el premio de Poesía para Niños de la Asociación de Literatura Infantil y Juvenil de la Argentina.

En palabras del escritor, la poesía es una lectura significativa para los pequeños e influye en su personalidad: Me interesa la posibilidad de cambio que brindan los poemas. Al escribir versos pienso en los lectores que serán tocados por las palabras. La poesía es como un jardín del Edén con frutos maravillosos.

Trabar un diálogo con los pequeños lectores es vital para Luján, quien se ha enriquecido con la creatividad y espontaneidad de los niños.

“Estar en contacto con ellos me permite adentrarme en un mundo cargado de revelaciones y con una libertad que no muchas veces tenemos los adultos: la de apropiarse del poema y transformarlo con su sensibilidad.

He trabajado durante mucho tiempo con niños en talleres de poesía, y realmente sus creaciones me siguen asombrando. Se adquiere mayor libertad y energía, explicó el autor.

El libro Esteban y el escarabajo presenta una estructura narrativa, cuyo relato está impulsado por el aliento poético. La idea del volumen surgió a partir del interés de Luján por el significado de los escarabajos en las culturas, y el asombro que provoca este insecto en los niños.

“Presento a un niño –como todos fuimos– que descubre a un escarabajo. Cada uno tiene su propio quehacer esa mañana o su vagabundear, en cierto sentido irrelevante y en otro, pletórico de vida.

Ese encuentro permite al niño experimentar una sorpresa, pero también el poder, porque su primer impulso es sacar su zapato y aplastar al insecto: ésta es una tendencia absolutamente natural en el ser humano. Aquí se desata una serie de movimientos en el alma, en el corazón del pequeño, y finalmente realiza una reflexión en torno a la vida.

Jorge Luján consideró que el aprendizaje del texto consiste en ponerse en el lugar del otro y descubrir que en la vida hay constantes cambios y se pueden invertir las situaciones de peligro.

Ahonda: La poesía brinda la posibilidad de conectarnos con la belleza y la sombra del misterio, y de contar a veces de manera simbólica o metafórica, a través de ritmos y sonoridades especiales, es decir, contar de forma independiente del lenguaje de comunicación cotidiano, que está cargado de libertad.

El libro-álbum del también cantante argentino, editado por el Fondo de Cultura Económica en su colección Los especiales de A la Orilla del Viento, incluye imágenes de la ilustradora italiana Chiara Carrer.