Martes 14 de junio de 2011, p. 24
Bruselas. Bélgica cumplió ayer un año de haber celebrado elecciones legislativas anticipadas y de no tener un gobierno estable debido a discrepancias entre las dos grandes comunidades del país, Flandes y Valonia, por cuestiones lingüísticas. Varios negociadores tratan de encontrar un equilibrio entre las posturas de los siete partidos más votados.