Pasó de 3.5% en 1970 a 7.9% en 2010; el grupo de cero a 14 años se reducirá más, prevé
Cambios en la pirámide poblacional
, por políticas de control natal, migración y otros factores
Miércoles 15 de junio de 2011, p. 38
En las cuatro décadas pasadas, el grupo de habitantes de la ciudad de México de cero a 14 años de edad ha tenido una caída ininterrumpida, pues de representar 41.4 de los capitalino en 1970, ahora se ubica en 22.4 por ciento, mientras la cantidad de personas de 65 años o más va en ascenso permanente, y pasó de 3.5 por ciento en el año referido a 7.9 por ciento en 2010, según datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi).
La información fue presentada durante el foro Mitos y realidades del envejecimiento de la población en el Distrito Federal, organizado por la Comisión de Población y Desarrollo, de la Asamblea Legislativa (ALDF), cuyo presidente, el diputado Mauricio Tabe, remarcó que la estructura poblacional de la ciudad de México ya no se refleja en una figura piramidal, sino de forma prácticamente cilíndrica, lo que incide en varios aspectos de la vida de esta ciudad, como son las políticas públicas en materia social y presupuestal.
El primero en exponer ante los asistentes a dicho acto fue José Luis Bonilla, director regional centro del Inegi, quien comentó que las expectativas poblacionales para 2030 indican que el grupo de capitalinos de cero a 14 años se reducirá aún más y de 22.4 por ciento de hoy llegará a 17.1 por ciento, y el grupo de los adultos mayores de 65 años seguirá creciendo, y pasará de 7.9 por ciento actual, a 16.4 para el año mencionado.
Incluso, dijo que siempre serán más los habitantes de la capital de 15 a 64 años de edad, que hasta la fecha representan 69.7 por ciento del total de pobladores; sin embargo el promedio de edad ha pasado de 22 años en 1930 a 31 años de edad actualmente. Esto implica que la mitad de la población estará en 10 años en 36 años, y es un claro envejecimiento de los capitalinos.
Detalló que factores que han incidido en esa modificación de la pirámide poblacional
son la mayor expectativa de vida, las políticas de control de la natalidad o bien los índices de migración e inmigración.
Para Mauricio Tabe, es fundamental que las autoridades locales tomen en cuenta ese cambio en los grupos poblacionales y modifiquen líneas de acción y reajusten sus políticas públicas para responder a la demanda de esa nueva configuración poblacional, en la que cada vez nacen menos niños en la ciudad de México.
En el foro de la ALDF participaron representantes de la Comisión de Derechos Humanos y de la Procuraduría General de Justicia, ambas del DF, así como del Inapam e Injuve, ambas de carácter federal.