El Instituto Federal Electoral (IFE) defendió la efectividad de su sistema de monitoreo, con base en el cual fundamenta sus resoluciones, así como otras medidas precautorias, como las que aplicó la semana pasada a 15 versiones de mensajes del gobierno federal que debieron salir del aire mientras se desarrolla el proceso especial sancionador correspondiente.

El consejero Alfredo Figueroa, presidente de la Comisión de Quejas y Denuncias del IFE, dijo que los críticos del monitoreo tienen todo su derecho de serlo; sin embargo, para contrarrestar esas afirmaciones hay evidencia: decenas de procesos electorales organizados y un conjunto de litigios en los que se ha empleado el sistema integral de administración de los tiempos del Estado para determinar qué se trasmite y qué no.

Siempre he creído que parte de esas críticas están vinculadas a una desazón que no se supera de 2007 para acá, indicó el consejero, en referencia a quienes se han opuesto a la reforma electoral de 2007-2008, que prohibió la compra de espacios en radio y televisión para la difusión de propaganda y mensajes en campañas electorales.

Hasta ayer, la Secretaría de Gobernación no había sido emplazada por la secretaría ejecutiva del IFE para la audiencia en que las partes presentan pruebas y alegatos acerca de la responsabilidad señalada.

La Comisión de Quejas precisó que con el sistema de monitoreo detectó más de 12 mil impactos de mensajes acerca de los logros del gobierno federal en las cuatro entidades en que se desarrollan campañas electorales, supuesto que, en caso de comprobarse, sería violatorio del código electoral y de la Constitución.

El gobierno federal, por conducto de la Secretaría de Gobernación, afirma que entregará pruebas suficientes para demostrar que elaboró y entregó a los concesionarios las pautas de difusión de mensajes apegadas a la ley.

Tras la aplicación de la medida precautoria, el consejero Figueroa sostuvo que el monitoreo del IFE está respaldado por grabaciones las 24 horas del día, los 365 días del año, sobre el contenido de las estaciones de radio y canales de televisión. Adicionalmente, dijo, se cuenta con monitoristas que verifican visualmente los materiales detectados como posibles elementos para la infracción de la norma.