Más de mil dibujos basados en una interpretación del mito helénico de Endimión integran la exposición del pintor y escultor Manuel Marín (Distrito Federal, 1951), la cual fue inaugurada ayer en el Centro Cultural Estación Indianilla.

En este mismo contexto, el artista presentó el libro Mirada, editado por Petra Ediciones, donde escribió una serie de ensayos en los cuales el ver y mirar se conjugan y disocian en una textualidad que oscila entre la teoría y la literatura.

Entre los participantes que comentaron el volumen estuvieron Teresa del Conde, crítica de arte y colaboradora de La Jornada; el politólogo Luis Ignacio Sáinz; Emilia Pacheco, directora de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; Federico Álvarez, director de la Revista Literatura Mexicana, y el autor.

La muestra Endimión en Latmos consta de mil 300 dibujos realizados a lápiz en hojas tamaño carta tipo bond y presentan diversas visiones sobre la acción de mirar y ser mirado por los sueños. Sobre la obra, cinco artistas escribieron textos a manera de fichas que permiten adentrarse en las imágenes.

El artista, quien ha desarrollado un concepto escultórico basado en siluetas que remiten a papeles doblados y recortados, comenzó en 2009 esta serie de dibujos, en la cual presenta ilustraciones que remiten al sueño, al soñador y a la imposibilidad de mantener un amor.

El mito de Endimión se refiere al bello pastor que eligió dormir eternamente para no envejecer y de quien la Luna se enamora.

Sobre el conjunto de dibujos, que se montaron en los muros del inmueble, ubicado en la colonia Doctores, Isaac Masri, director del recinto escribió a manera de presentación: Concebidos con una poética semiabstracta en la que el personaje del primer plano significa al soñador y el paisaje abstracto o arquitectura inútil que lo rodea remite al sueño, los dibujos no se constituyen como una narrativa del mito sino, como presentación de imágenes que existen al unísono evidenciando tanto la contundencia del presente inmediato como la inaccesibilidad del futuro deseado.

Con esta exposición, puntualizó Masri, el Centro Cultural Estación Indianilla incorpora el dibujo mexicano contemporáneo a las actividades artísticas programadas para este género.

Manuel Marín se ha caracterizado por una creación bidimensional y tridimensional que se sustenta en la acción y el pensamiento dibujístico. Ingeniero de profesión y artista visual formado en La Esmeralda, el escultor también cuenta con estudios en matemáticas y literatura, los cuales han impactado sus poéticas y exploraciones temáticas.