Sicarios los obligan a dar atención a heridos en balaceras; les ofrecen botón de emergencia
Miércoles 6 de julio de 2011, p. 37
Zacatecas, Zac., 5 de julio. Ante las constantes amenazas del crimen organizado, cuyos pistoleros los obligan a recibir heridos en salas de emergencia e incluso en quirófanos, cientos de enfermeras, camilleros y médicos de los Servicios de Salud de Zacatecas exigieron a las autoridades estatales mayor vigilancia y atención inmediata de las corporaciones policiacas locales.
Encabezados por Norma Angélica Castorena Berrelleza, secretaria general de la sección 36 del sindicato del sector salud, y Jesús Reyes Ruiz Bustamante, director del hospital general de Zacatecas, los trabajadores se reunieron con funcionarios del gabinete de seguridad pública en el auditorio del nosocomio.
Ante Arturo Nahle García, procurador general de Justicia del estado, y el secretario de Seguridad Pública, el general retirado Jesús Pinto Ortiz, los inconformes demandaron al gobierno actuar ante el crimen.
Raúl Estrada Day, secretario de Salud de Zacatecas, reveló que en meses recientes han renunciado 12 médicos del hospital regional de Ojocaliente por presiones de delincuentes.
Castorena Berrelleza entregó a los reporteros una copia del oficio membretado que el 28 de junio el sindicato del sector salud entregó en la secretaría particular del gobierno del estado, en el cual se pide al mandatario Miguel Alonso Reyes que intervenga.
Señor gobernador, la situación de inseguridad que hoy padecemos es inédita e histórica, pues Zacatecas era tranquilo y bucólico, dedicado al trabajo productivo y a la paz. Hoy vive en la incertidumbre y la violencia
, señala el texto.
Estamos convencidos de que es nuestra obligación profesional atender a cuanto paciente nos lo demande, incluso cuando se trate de aquellos enrolados en la delincuencia, pero nunca obligados por la intimidación armada, el trato ofensivo y denigrante ni con amenazas de muerte
, puntualizan en el documento.
Los trabajadores de la salud se sienten en total indefensión y claman por seguridad en sus centros de trabajo. Voltean a esta representación porque sienten que las autoridades no cumplen su función constitucional de garantizar la seguridad
, concluye.
Arturo Nahle y Jesús Pinto escucharon reclamos y testimonios de médicos y enfermeras, quienes señalaron que aunque la presencia de hombres armados en los hospitales se denuncia de inmediato al teléfono 066 , en algunas ocasiones los policías estatales y ministeriales dejan huir a los delincuentes, con el argumento de que que los asuntos de armas largas son sólo competencia del Ejército
.
En respuesta, el procurador de Justicia de Zacatecas dijo: Tenemos que admitir que son policías chafas
y que no se ha depurado a las corporaciones. Por su parte, el secretario de Seguridad Pública del estado ofreció a los trabajadores instalar botones de emergencia
en los principales hospitales.