Torteros de la ciudad y de otros estados prepararon la torta más grande del mundo. En tan sólo tres minutos con 57 segundos elaboraron el platillo de 50 metros de largo con diferentes especialidades. Hubo desde la tradicional cubana, hasta la de pata de puerco.

Sin embargo, únicamente duró unos minutos, porque el enorme platillo mexicano de 650 kilogramos se repartió entre las decenas de visitantes que acudieron a la inauguración de la octava Feria de la Torta, que se lleva a cabo en la delegación Venustiano Carranza.

Los negocios en su mayoría son familiares, como Tortas Chuy, donde la especialidad es la poblana, cemitas de Puebla que venden en la colonia Agrícola Oriental desde hace 40 años, como pan caliente. La familia Gallardo, dueña del local, prepara diariamente 300 tortas, pues es un negocio redituable; pese a ello se han visto afectados por la venta de comida rápida, expuso Patricia Gallardo.

La feria es la oportunidad para la promoción de la torta y con ello apoyar a este sector, que se ha visto afectado con pérdidas hasta de 80 por ciento ante el crecimiento de negocios de comida rápida o porque lo han clasificado como comida chatarra. Para Gallardo, es un alimento nutritivo que puede estar exento de grasa, eso es a gusto del cliente.

La feria se mantendrá hasta el próximo domingo en la explanada delegacional. Este año participan 55 negocios de la ciudad y de estados como Jalisco, Puebla, Yucatán, Michoacán, Veracruz, Tabasco y Chiapas. También hay invitados internacionales.

En la inauguración, el jefe delegacional, Alejandro Piña, estuvo acompañado por los diputados locales Alejandra Barrales Magdaleno y Julio César Moreno.