e acaban de publicar numerosas cifras. Por variar, los proyectos que rebosan en la boca de los funcionarios de plano no producen nada, y otros, considerados fundamentales, van en decadencia. Pero áreas en las que Pemex conserva personal, equipo de perforación y otros medios, sí aumentan su producción.
Las cifras se refieren en su mayoría al segundo trimestre de 2011, y las comparan con el mismo período del año anterior. El petróleo crudo bajó en este periodo en 0.8 por ciento. Pero esta bajada hubiera sido mayor de no ser por el alza del crudo súper ligero en 8.2 por ciento. Y este aumento, a su vez, recae básicamente en el Delta del Grijalva, en la zona costera de Tabasco. Ya hemos señalado que estas áreas, y la que tienen enfrente, Litoral de Tabasco, en el subsuelo se tocan y tienen una muy alta productividad, además de su gran calidad.
Si vemos los nuevos descubrimientos, veremos algo similar. El pozo más productivo descubierto, Xanab 101, de Litoral de Tabasco, tuvo una producción inicial de crudo ligero de 3 mil 786 barriles diarios. Como la producción total de los pozos nuevos fue de 4 mil 13 barriles por día, la de Xabab, y al mismo tiempo la de Litoral de Tabasco, fueron de 94 por ciento del total de descubrimientos.
Ya en los tres años anteriores el pozo más productivo en gas, y muy buenas posiciones en crudo, fueron de Litoral de Tabasco. Los principales pozos descubiertos, además del mencionado, fueron Tsimin y Xux, muy cercanos entre sí. Y está en perforación, cerca de los otros, Kinbe, también con buenas perspectivas.
En gas natural, también hay una baja casi general. Sólo Litoral de Tabasco aumentó de 546 de millones de metros cúbicos en el segundo trimestre de 2010 a 644 millones en el mismo lapso de 2011. Es decir, tuvo un aumento de 18 por ciento en un sólo año.
Todos los términos que gozan de repetir los funcionarios, no producen nada, como campos maduros y aguas profundas. A Chicontepec, ya mejor no lo mencionan por separado, ni en general.
La transformación el petróleo no va mejor. La importación de la gasolina para automóvil aumentó en el mismo periodo de 372 barriles diarios a 413. Esto equivale a que haya aumentado en 11 por ciento. Con los precios crecientes de la gasolina, el consumo de la mayoría de los mexicanos debería bajar. El aumento de 11 por ciento debe atribuirse a gente con dinero para comprar más.
Es evidente que el cambio en la industria petrolera no sólo es necesario y urgente. También es posible, y en esa dirección debemos avanzar:
Inversión con bienes y personal de Pemex, en lugares que han mostrado productividad.
Exploración, con preferencia en áreas con similitud con las más productivas.
Nuevas refinerías, para dejar de importar gasolina y otros refinados. Medidas para el uso más racional de la energía con el mismo propósito y para defender el medio ambiente.
Acabar con las importaciones de gas natural. Para superar estos dos tipos de importación, se deben usar plantas generadoras de electricidad que usen energéticos renovables, como las hidroeléctricas, las eólicas y las geotérmicas; y también plantas eficientes que usen combustibles de producción nacional, incluso combustóleo desulfurado.
Se trata de bienes estratégicos. Por lo mismo, deben ser y, en su caso, devolverse a la nación. No deben ser sujetos de importación si tenemos lo necesario en el país, como es el caso.
Todo esto es fundamental para la transformación que el país necesita.