Netanyahu planea nombrar equipo que concilie con los inconformes
Camina como egipcio. Jerusalén y otras ciudades también fueron escenarios de protestas masivasFoto Reuters
Domingo 7 de agosto de 2011, p. 24
Tel Aviv, 6 de agosto. Unos 250 mil israelíes marcharon este sábado para protestar por la escalada del costo de la vida, que ha catapultado la economía a la agenda política y presiona al primer ministro, Benjamin Netanyahu.
El premier planeaba nombrar un equipo de nivel ministerial el domingo para hacer frente a las demandas de los inconformes. En cerca de un mes, las protestas han pasado de ser manifestaciones estudiantiles a movilizaciones de escala nacional, que representan a la oprimida clase media israelí.
Israel prevé un crecimiento de 4.8 por ciento este año –en un momento de estancamiento económico en muchos países occidentales– y posee un nivel de desempleo relativamente bajo, de 5.7 por ciento. Pero los grupos empresariales y las disparidades en los salarios hacen sentir a muchos ciudadanos ajenos a esos beneficios.
La gente demanda justicia social
, decía uno de los carteles utilizados en la marcha de hoy, en la mayoría de los cuales se evitaron los lemas partidistas, mientras criticaron las doctrinas de libre mercado de Netanyahu.
La policía afirmó que al menos 250 mil personas salieron este sábado a las calles en Tel Aviv, Jerusalén y otras ciudades, un gran aumento respecto a las marchas de hace dos fines de semana.
Movilizaciones a esta magnitud en un país como Israel, con una población de 7.7 millones de habitantes, normalmente están relacionadas con asuntos como la guerra y la paz.
En la encuesta Índice de la paz, realizada por dos académicos israelíes, cerca de la mitad de los participantes afirmaron que las disparidades de salarios –una de las mayores entre los países pertenecientes a la OCDE– debería ser la principal prioridad del gobierno, mientras 18 por ciento exige al gobierno resolver la escasez de vivienda accesible.
Cerca de 31 por ciento citó las estancadas conversaciones de paz en Medio Oriente, la imagen internacional de Israel o la necesidad de reforzar las fuerzas armadas como prioridades que no ven reflejadas en el ejercicio del gobierno.
Las manifestaciones han eclipsado el enfrentamiento de Netanyahu con los palestinos ante su intento de presionar por un reconocimiento de la ONU como una nación el próximo mes.
No ha habido nada así durante décadas. Toda esta gente reunida, tomando las calles, demandando un cambio. Es la revolución
, afirmó Baroch Oren, de 33 años, un líder de la protesta.
El ministro de Comunicaciones, Moshe Kahlon, nombrado por el portavoz de Netanyahu como miembro probable del equipo conciliador, dijo que se requería una solución incluso si cuesta miles de millones
, en un momento en que Israel observa los problemas de deuda de Estados Unidos y parte de Europa.
La carga de deuda israelí es de 75 por ciento del producto interno bruto, cifra menor que las de la mayoría de las economías occidentales.