París. El tsunami que sacudió a Japón el pasado 11 de marzo propagó olas que ocasionaron icebergs gigantescos en el Antártico, a unos 13 mil kilómetros de distancia, según unas imágenes difundidas ayer por la Agencia Espacial Europea. Las imágenes radar fueron tomadas el 12 de marzo por el satélite Envisat y revelan que varios icebergs gigantes se desprendieron de las plataformas de hielo que prolongan la capa glacial en la bahía de Sulzberger. Cuatro días más tarde, los icebergs flotaban en el Mar de Ross. El mayor de los bloques de hielo medía 9.5 por 6.5 kilómetros.