El menor, de dos años, salió de su casa cuando un familiar fue a trabajar
Habría vagado tres horas sin rumbo por calles de la colonia Miguel Hidalgo
Viernes 12 de agosto de 2011, p. 45
Cuando Mariana Sánchez Hernández, de 35 años, despertó y vio que su pequeño hijo no estaba dormido junto a ella, ni en ningún lugar cercano a su domicilio, salió desesperada a buscarlo.
Sin embargo, Enrique, de dos años y ocho meses de edad, había sido encontrado horas antes, alrededor de las 6:30 de la mañana, caminando solo por avenida Las Torres y Corregidora, colonia Miguel Hidalgo, delegación Tlalpan.
Afortunadamente para la familia fueron policías del sector Fuente quienes vieron al bebé parado en una banqueta, vestido únicamente con una playera anaranjada, pañal y calcetas blancas.
Los uniformados se acercaron a ver si alguno de los transeúntes lo buscaba, pero al ver que nadie parecía hacerlo, arroparon al pequeño, quien preguntaba constantemente por su mamá.
Ante los riesgos que corría el niño por la escasa ropa que llevaba, el frío que sentía y sin nadie que se hiciera responsable de él, los policías decidieron llevarlo al sector policiaco correspondiente para comenzar la búsqueda de los familiares.
Los mandos policiacos solicitaron apoyo médico, por lo que llegó una ambulancia con personal del Escuadrón de Recate y Urgencias Médicas quienes, al revisar al menor, descartaron que tuviera lesiones, pero le diagnosticaron principios de hipotermia, por lo que ahí mismo le proporcionaron los primeros auxilios.
Mientras, una patrulla recorrería los alrededores y voceaba el hallazgo del niño. La acción se enfatizó frente a una lechería de Liconsa, donde había muchas personas formadas, pero nadie respondió al llamado.
Mientras tanto, Mariana Sánchez buscaba con desesperación a su hijo y, al ver a una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, se acercó para pedir ayuda.
Los policías, enterados del bebé que había sido encontrado horas antes, la llevaron al sector para que lo reconociera antes de ser trasladado al Hospital Infantil de Coyoacán.
De acuerdo con la señora, su hijo pudo haber salido de su domicilio cuando despertó su tío, chofer de microbús, quien al irse a trabajar, a las 3:30 horas, como todos los días
, dejó abierta la puerta y fue seguido por Enrique sin que nadie se percatara de ello.
Algunas mujeres policías del sector no pudieron evitar llamar la atención de la mujer sobre los cuidados y precaución que debía tener. Ella, entre llanto, aseguraba que amaba a su hijo, que nunca lo había maltratado y que agradecía profundamente que la policía lo hubiera encontrado.
Aunque Enrique y su mamá sólo estaban asustados por lo que pasó, el niño fue llevado al Hospital Infantil de Coyoacán, mientras ella quedó a disposición del Ministerio Público adscrito a la Coordinación Territorial de Seguridad Pública y Procuración de Justicia TLP-1, para acreditar el lazo familiar.