Durante su infancia en Los Mochis, Sinaloa, Javier y Luis Alberto Orozco imaginaron ser futbolistas profesionales y compartir la cancha.

Es algo que soñábamos, algún día estar en primera división. Decíamos de niños que jugar juntos o enfrentarnos sería bueno, confesó Javier, el Chuletita.

Tuvieron que transcurrir cerca de 15 años para concretar ese anhelo y será este sábado cuando el celeste y su hermano, Chuleta, de Xolos, serán rivales por primera vez en la máxima categoría.

En los seis años que transcurrieron desde su debut todos los juegos han sido especiales, porque el hecho de estar en el primer circuito es algo muy bonito, explicó Javier. Sin embargo, la jornada seis del torneo Apertura 2011 conlleva una satisfacción especial: Creo que este es mucho mejor que esos partidos anteriores por el hecho de que venga mi hermano, que juguemos por primera vez y que gracias a Dios a él se le haya dado también la fortuna de subir.

Chuleta y Chuletita, ambos delanteros, se formaron en las fuerzas básicas del Cruz Azul.

Luis, de 27 años de edad, debutó en 2003 y en 2008 pasó a Monarcas y a su filial Mérida, de la segunda división. En esa categoría continuó con León y desde 2010 está en el club de Tijuana.

Javier, de 23, quien había intentado antes dedicarse al beisbol, debutó con La Máquina en 2005. Destacó entonces como una gran promesa, fue goleador en la Concachampions 2008-2009 y titular indiscutible en el torneo local de 2010.

Fue convocado a la selección nacional pero después su rendimiento decayó. Atravesó una mala racha de 11 meses sin anotar, periodo al que logró poner fin hace dos semanas, tras marcar gol en el partido que Cruz Azul le ganó al Atlante (2-1).

Por otra parte, el portero Yosgart Gutiérrez prometió seguir luchando por la titularidad, a una jornada del posible retorno de José de Jesús Corona: No voy a bajar los brazos, seguiré en pie de guerra pase lo que pase.