San Cristóbal de las Casas, Chiapas, 18 de agosto. La primera sala penal regional colegiada del distrito judicial de Tuxtla Gutiérrez ratificó el auto de formal prisión al ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía por los delitos de peculado, ejercicio indebido del servicio público, abuso de funciones públicas, abuso de autoridad y asociación delictuosa, relacionados con un bono por 104 millones de pesos.

En un comunicado, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) dijo que la resolución le fue notificada esta tarde por el juez penal de primera instancia del distrito judicial de Huixtla, en cuyo penal se encuentra el ex mandatario desde el 16 de agosto por motivos de seguridad.

Se comprueba quebranto

La resolución avala el auto de formal prisión tras el análisis del cúmulo de pruebas presentadas por el agente del Ministerio Público investigador, entre las que destacan testimoniales y peritajes en materia contable y grafoscopía donde se expusieron pólizas de cheques, fichas de depósitos y estados de cuenta que fueron emitidos por la entonces Secretaría de Administración, en las que se comprueba que los 104 millones de pesos sí pertenecían al erario, agregó.

La dependencia manifestó: Por unanimidad de votos, los magistrados confirman el auto constitucional del 14 de junio, pronunciado por el juez tercero del ramo penal para la atención de delitos graves del distrito judicial de Tuxtla y Chiapa, con residencia en Cintalapa, en la causa penal número 96/2011, en el que se decretó formal prisión a Pablo Salazar Mendiguchía como probable responsable de los delitos.

El 14 de junio, tras escuchar la resolución del auto de formal prisión, Alfredo Domínguez Oliver, uno de los tres abogados de Salazar Mendiguchía, informó que apelarían de la determinación. Somos respetuosos de las instituciones, pero no compartimos la decisión judicial, dijo en aquella ocasión.

El ex mandatario, quien gobernó en el periodo 2000-2006, enfrenta un segundo proceso penal por homicidio doloso, a raíz de la muerte de dos bebés en el Hospital general K, en el municipio de Comitán de Domínguez, en 2002.

Pablo Salazar fue detenido en el aeropuerto de Cancún, Quintana Roo, el 7 de junio e internado en penal El Amate, de donde el martes anterior fue trasladado al penal de Huixtla, situado a 40 kilómetros de la fronteriza ciudad de Tapachula.

Días después de su detención, Salazar Mendiguchía inició un ayuno en el penal de El Amate, pero lo suspendió el 13 de junio a petición de su familia.