Domingo 21 de agosto de 2011, p. 21
Teherán, 20 de agosto. Dos estadunidenses acusados de ser espías de Washington, capturados el 31 de julio de 2009 cuando se internaron ilegalmente a territorio iraní desde la frontera del norte de Irak, fueron condenados hoy a ocho años de cárcel en Teherán.
Shane Bauer y Josh Fattal, que dijeron ser excursionistas y se declararon inocentes el 6 de febrero pasado, fueron sentenciados a pasar tres años en prisión por haber ingresado a territorio iraní sin permiso de las autoridades migratorias, y a purgar una pena de cinco años por realizar espionaje para una agencia estadunidense
, según información difundida por la televisión estatal iraní.
Bauer y Fattal fueron detenidos en una región habitada mayoritariamente por kurdos, que ocupan territorios de Turquía, Irak e Irán. Las elevaciones bordean en el norte la cuenca mesopotámica y son consideradas como una extensión del sistema alpino, que viene desde la península de los Balcanes hasta el Himalaya.
Los estadunidenses fueron detenidos junto a una mujer llamada Sarah Shourd, quien fue liberada mediante fianza de medio millón de dólares, en septiembre de 2010.
La detención de los jóvenes, de entre 20 y 30 años, tensó las relaciones entre Washington y Teherán, rotas desde 1979 y agravadas tras la invasión a Irak en 2003.
Una portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, dijo que hemos visto informes de que las autoridades judiciales iraníes condenaron a Bauer y Fattal a ocho años de prisión. Estamos trabajando para confirmarlo
.