Un oficial del Ejército Mexicano murió y tres soldados resultaron heridos como saldo de un enfrentamiento contra presuntos integrantes de Los Zetas, ocurrido la madrugada de este domingo en la cabecera municipal de Jalpa, Zacatecas. Asimismo, fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) confirmaron que ayer al mediodía tres presuntos delincuentes fueron abatidos por militares en la misma localidad, ubicada 135 kilómetros al sureste de la capital del estado.

Aparentemente, el enfrentamiento armado entre militares y supuestos zetas tuvo su origen en otro incidente ocurrido 30 kilómetros al sur, en la cabecera municipal de Moyahua, Zacatecas, donde los sicarios intentaron levantar a policías municipales que se encontraban de guardia en la comandancia del lugar.

Los policías de Moyahua opusieron resistencia y sostuvieron una primera refriega en contra de los delincuentes, mientras pedían apoyo por radio y teléfono a otras corporaciones y al Ejército Mexicano.

Desde el norte de Jalisco, policías de esa entidad acudieron a auxiliar a los agentes municipales de Moyahua, lo que obligó a los presuntos zetas a emprender la huida; cruzaron el municipio de Juchipila y llegaron a Jalpa, donde los delincuentes combatieron contra militares adscritos al 53 Batallón de Infantería.

Entonces se inició un enfrentamiento en el que se usaron rifles AK-47, conocidos como cuernos de chivo, y AR-15, así como granadas de fragmentación. Después de varios minutos de tiroteo, tres delincuentes cayeron abatidos, al igual que un oficial del Ejército Mexicano cuyo nombre no divulgó la Sedena por la seguridad de su familia. Otros tres soldados resultaron heridos durante el choque armado; se informó que fueron atendidos en el hospital regional de Tlaltenango, Zacatecas, 28 kilómetros al poniente de Jalpa, y al cierre de esta edición se les reportó como estables y fuera de peligro.

Desmienten parentesco de presunto narco con Ángel Aguirre

El titular de la Procuraduría General de Justicia de Guerrero, Alberto López Rosas, pidió ayer una tregua a los grupos del crimen organizado que se disputan el control de las principales ciudades del estado, y reiteró que el presunto narcotraficante Víctor Aguirre no tiene parentesco con el gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero.

López Rosas presentó en Chilpancingo a 10 presuntos integrantes de la banda La Barredora, a quienes se atribuye el secuestro de empresarios y la mutilación de policías en el puerto de Acapulco. Durante la conferencia de prensa, el procurador solicitó una tregua a los diversos cárteles de la droga y otros grupos delictivos que han provocado hechos de violencia en Acapulco.

Yo esperaría una tregua; nadie, nadie tiene derecho a poner en riesgo la tranquilidad de una sociedad; nadie tiene derecho a hacer prevalecer sus negocios, más cuando son ilícitos, a costa de una sociedad que tiene el afán de trabajar y tiene que esforzarse por sacar adelante a su familia. Los grupos criminales no tienen derecho a poner en riesgo la vida de una sociedad, su productividad, en aras de sus acciones, dijo el funcionario.

El procurador guerrerense consideró que aun en la delincuencia organizada deben respetarse ciertos códigos que hoy están completamente desbordados por los mismos criminales, de tal manera que esas bandas están acabando con la tranquilidad de muchas ciudades y muchos municipios; la tregua es para respetar la vida de una ciudad, la vida de una población y la vida de una sociedad; que no mantengan esta conducta que viene a afectar la vida productiva de toda la sociedad acapulqueña.

En este contexto, la noche del pasado sábado fueron localizadas tres cabezas humanas en el interior de una costalilla, a la salida del maxitúnel de Acapulco, sobre la avenida Cuauhtémoc. Las primeras investigaciones señalan que las cabezas podrían pertenecer a los tres cuerpos decapitados –dos de hombre y uno de mujer– encontrados el viernes anterior en el interior de una camioneta de lujo con reporte de robo, a unos metros de la glorieta de La Diana. Los cadáveres estaban atados de pies y manos.

Asesinan a funcionario municipal en Tamaulipas

Ricardo Cruz García, secretario del ayuntamiento de Ciudad Mante –cuyo alcalde es el priísta Humberto Flores–, murió de un balazo en el interior de su domicilio, ayer por la tarde, informó la procuraduría de Tamaulipas.

Por su parte, el gobernador Egidio Torre Cantú repudió el homicidio en un comunicado dirigido a los medios de comunicación, e indicó que instruyó a la procuraduría estatal para que esclarezca los hechos y detenga a la brevedad posible a los culpables del crimen.

De igual manera, ayer se documentaron 14 asesinatos que tendrían relación con la delincuencia organizada, tres de los cuales corresponden a dos varones y una mujer, cuyos cuerpos fueron localizados en una fosa clandestina ubicada en la colonia Primero de Mayo, en la capital de Chihuahua.

La jornada violenta incluyó seis homicidios en Guerrero, dos en Sinaloa, dos en Sonora y uno en Baja California.