Los familiares de los jóvenes muertos en el operativo en la discoteca News Divine pueden tener acceso a las copias del expediente de manera gratuita si las solicita al Ministerio Público, aseguró el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Edgar Elías Azar.

Entrevistado luego de la ceremonia en la que se entregaron las llaves de la ciudad a la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, reconoció que la juez 19 penal, Beatriz Corona Valdés, quien lleva el juicio, no asesoró debidamente a la afectada, al no informar que se podía pedir esa documentación a la representación de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal sin costo alguno.

El domingo pasado, familiares de las víctimas denunciaron que al pedir acceso al expediente del caso, la juez correspondiente les contestó que primero tendrían que pagar casi un millón de pesos por concepto de copias.

El magistrado dijo que ayer mantuvo comunicación con la señora Carmen Rivas Nájera, a quien citó en su oficina para orientarla al respecto, junto con una asesora de la procuraduría capitalina, pero la señora ya no apareció. Yo estuve esperando todo el día, dijo.

Por su parte, las madres de las víctimas de la discoteca News Divine afirmaron que el Ministerio Público siempre les ha negado la información del proceso que se le sigue a las personas responsables por la tragedia ocurrida en 2009, donde murieron 12 personas.

Leticia Morales, madre de Rafael Morales, dijo en entrevista con La Jornada que este miércoles se reunirán con el presidente del TSJDF, Edgar Elías Azar, luego de que éste se comunicó personalmente con ella vía telefónica para acordar una reunión. Morales explicó que esto sucedió hasta que hicieron pública la negativa de acceder al expediente de la investigación, ya que ninguna de las afectadas sabe hasta ahora qué se ha hecho en el proceso. Lo único que sabemos es que todos los involucrados están libres.

Leticia Morales narró que durante todo el proceso han sido recibidas con malos tratos e incluso el Ministerio Público, que supuestamente aboga por nosotros, siempre nos dijo que no nos tenía por qué notificar nada, que sólo tenían que ir cuando tenían las citas, pero si nosotros queríamos saber algo, nadie nos informaba nada; hasta el momento, sólo nos sentimos engañadas.