No pudo evitar las lágrimas cuando Juan José Torres Mendoza recordó que fueron asesinados algunos de sus amigos en la violenta Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde vive, como tampoco aguantó el llanto al ser reconocido como el mejor portero del Homeless World Cup París 2011 (Torneo de Barrios), en el que los representativos nacionales femenil y varonil lograron el subcampeonato el pasado domingo.

La historia de Pepe es una de las miles que han padecido los niños de la calle invitados a participar en el torneo de futbol callejero que, luego de una eliminatoria nacional entre 17 mil 400 participantes, integró a los dos combinados que acudieron al certamen mundialista en París, donde por un pelito (un gol) no se trajeron el campeonato.

Las mujeres fueron vencidas por la mínima diferencia 4-3 ante las kenianas, mientras los hombres sucumbieron por el mismo marcador ante Escocia, aunque se coronaron como el representativo más guapachoso del certamen disputado en los Campos parisinos de Marte, teniendo como inmutable testigo a la histórica Torre Eiffel.

Ayer la Fundación Telmex les rindió un homenaje por sus logros, antes de anunciar que la sede del siguiente certamen, donde ahora sí vamos a ser campeones, será México, dijo con firmeza el director de la telefónica, Arturo Elías Ayub.

El dirigente se refirió a la fortaleza, el corazón hecho esfuerzo y la tenacidad de jugadores y cuerpos técnicos que mostraron en Europa de “qué estamos hechos los mexicanos.

La verdad es que debemos estar orgullosos de lo que han logrado. Es un triunfo no sólo para ustedes, sino para sus familias, es un trofeo para el país, una victoria para todos, al aludir a que tiempo atrás los ahora subcampeones del orbe andaban en actividades que prefirió ni siquiera recordar.

Alegres, dicharacheros, bailadores y de buenos modales, los jugadores y cuerpos técnicos dieron rienda suelta a las porras y cánticos creados para la ocasión, y hasta se les escapó alguna lágrima cuando escucharon las notas de la mexicanísima Cielito Lindo, de gratos recuerdos para todos, así como al momento de proyectar fotografías de los momentos vividos en París.

La capitana de la oncena femenil, la michoacana María Concepción Molina, fue clara al exponer que con apoyo dejó atrás las drogas y el alcohol: Me salí de la calle para regresar a mi casa, por lo que ahora quiere seguir estudiando para ser alguien en la vida.

Juan José Torres, nombrado el mejor portero del certamen mundialista, no aguantó la emoción y lloró luego de recordar a sus compañeros muertos por la violencia en su natal Ciudad Juárez.

Fueron compañeros de antro y de alcohol, cuates con los que alguna vez amanecimos tirados de borrachos en la calle (...) camaradas del desastre. Regresará en unos días (a la ciudad chihuahense) para anunciarles que vuelvo, sí, pero con buenas noticias y una nueva vida.

Quiere una oportunidad para probarse con Indios de Ciudad Juárez y cumplir otro de mis sueños, puntualizó el guardameta.