agravió a los zacatecanos
En la entidad hay que trabajar mucho y ver más allá
, señala
En la evaluación de la precaria situación en la que la pasada administración dejó al estado no hay un ánimo de venganza política, tampoco de lucha partidista
Lunes 12 de septiembre de 2011, p. 12
En la evaluación del precario estado en el que la pasada administración dejó a Zacatecas no hay un ánimo de venganza política, tampoco de lucha partidista. Los datos duros, los números evidencian que la gestión de Amalia García le provocó un daño patrimonial a los zacatecanos, sostiene el gobernador Miguel Alonso Reyes al iniciar su segundo año al frente del gobierno estatal.
Sin ir más allá de las motivaciones que llevaron a la ex gobernadora a tomar algunas decisiones, que en el ámbito económico agravian a la sociedad al dejar graves presiones presupuestales y afectar el erario, y que en materia de seguridad dejaron una lamentable ausencia de gobierno en la mayor parte del estado, las auditorías ya están en el Poder Judicial, que se encargará de resolver lo que proceda
, insiste en entrevista con La Jornada.
Con todo, no busca justificaciones en el pasado inmediato y se plantea este sexenio como el inicio de un ambicioso proyecto de largo aliento que, confía, le cambie por fin el rostro a un estado en el que la adversidad parece no dejar espacio para la esperanza.
–¿Cómo encontró el ánimo de los zacatecanos luego del pasado gobierno?
–Encontré una sociedad desmotivada, que demandaba una explicación, pero al mismo tiempo cobijando una esperanza de que las cosas mejoraran en su estado. A un año de distancia, percibo una población participativa, motivada a caminar para que Zacatecas salga adelante. La gente está consciente de que tenemos una situación económica difícil, que la situación de seguridad no es nada halagüeña ni en el estado ni en el país, pero estamos tomando decisiones no cortoplacistas ni sexenales, sino con visión de largo alcance.
–Sin embargo, todo parece serles adverso.
–Nosotros confiamos en que en este sexenio dejaremos las bases para un estado fuerte en materia de inversiones y generación de empleo, con finanzas públicas sanas, con mejores índices de seguridad.
–Entre las muchas presiones está la disminución de la migración hacia Estados Unidos y la caída de las remesas.
–La migración es una válvula de escape que, es cierto, se ha complicado debido a las condiciones en la frontera. De igual forma las remesas han caído en casi 700 millones de dólares mensuales, debido a la contracción económica de Estados Unidos. Los jóvenes que ya no pueden emigrar al país del norte y las familias que ya no cuentan con las remesas para solventar sus necesidades más apremiantes, hoy demandan educación, empleo, salud y seguridad, servicios que el estado debe proveerles.
–¿Cómo enfrentar esto?
–Me comprometí a fortalecer un Zacatecas productivo y moderno, y dentro de éste constituir un Consejo de Desarrollo Económico, desarrollar clústeres o grupos de afinidad por producto, mercado y región; atraer inversiones, tender el gasoducto, y establecer una gran alianza estratégica regional para aprovechar la ruta del Tratado de Libre Comercio.
“Constituimos el Consejo de Desarrollo Económico para diseñar, con visión de largo plazo, las estrategias que generarán los empleos que urgen a la entidad. Este organismo, formado por empresarios y académicos, está trabajando intensamente y dando resultados.
“Integramos el clúster minero, pionero en el país, donde participan las principales compañías del ramo asentadas en el estado, que generan una cadena de valor que deriva en más fuentes de trabajo para los zacatecanos.
Concretamos el proyecto del gasoducto, cuya construcción esperada durante cerca de 30 años será licitada este 2011 y con ello tendremos un servicio que multiplicará las alternativas de inversión. Esto transformará el futuro de Zacatecas, convirtiéndolo ahora en un lugar prometedor de desarrollo industrial, de importancia nacional.
–¿En cuanto a otros servicios?
–Emprendimos un ambicioso programa social de acciones solidarias con quienes padecen la incertidumbre de saber si mañana comerán sus hijos, si podrán ir al doctor o si les depara algún otro futuro, que no sea el de desafiar la muerte para cruzar la frontera. Para los más pobres instrumentamos el programa de Superación de la Marginación Social, Sumar, mismo que arrancamos con una bolsa inicial de mil 500 millones de pesos. Se trata del programa social más ambicioso en la historia de Zacatecas, que apoya a las personas con discapacidades, adultos mayores, madres cabezas de familia y estudiantes talentosos que requieren de aliento para seguir en la escuela.
–Zacatecas tiene gran número de medianas y pequeñas empresas. ¿Hay algún programa que las atienda?
–Incrementamos 200 por ciento en el Fondo Plata la disponibilidad de recursos para otorgar financiamientos, pasando de 150 a 440 millones de pesos. Apoyamos este primer año de trabajo 240 proyectos para iniciar o consolidar pequeños negocios en 36 municipios. Pero además, conseguimos en 12 meses la inversión de capital privado japonés para la instalación de Yusa Autoparts y Koide Kokan. Es una inversión superior a 110 millones de dólares, que generará más de mil 400 empleos directos.
–¿Cómo van a enfrentar el tema de la inseguridad?
–Este año destinaremos 2 mil 400 millones de pesos a la seguridad pública, cifra sin precedente en la entidad. Desde mi toma de protesta me comprometí a combatir la impunidad, porque la no aplicación de la ley también es un factor criminógeno. En tan sólo un año abatimos en 50 por ciento el enorme rezago que heredamos en materia de cumplimiento de órdenes de aprehensión. Estamos modernizando la Procuraduría General de Justicia, fortaleciendo y descentralizando los servicios periciales para arribar a la investigación científica del delito. Gracias a todo lo anterior, Zacatecas es hoy el quinto estado del país con menor incidencia delictiva, de acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública. Además de las instalaciones militares que se ubican en los puntos de acceso al estado.
–¿Cómo impactó ese descuido de la pasada administración en materia de seguridad?
–Informes del Consejo de Integración Juvenil registran un par de ejemplos claros sobre los resultados de la casi inexistente política que recibimos contra el delito. En la capital del estado pasaron de siete a 59 las colonias de alto riesgo, y el inicio en el consumo de drogas fue a edades cada vez más tempranas. Ese fue el estado que encontramos y de ese tamaño es el reto que hoy enfrentamos.
–Otra presión para los gobiernos estatales es la descentralización educativa. ¿Cómo impacta esto en Zacatecas?
–El déficit educativo es una pesada carga para el Estado, derivado de los impactos negativos de la actual fórmula de distribución de recursos para la educación básica y de las partidas no reconocidas por la Federación. Esto arroja hasta la fecha un déficit superior a 2 mil 300 millones de pesos, necesarios para pagar sueldos y aguinaldos, así como para liquidar la aportación del gobierno del estado a los organismos de educación superior. Necesitamos plantear una salida a este problema recurrente. Convocamos también a la Cámara de Diputados federal al replanteamiento de la fórmula de distribución de recursos, considerando la aprobación de un fondo compensatorio, que reconozca el déficit que padecen estados como el nuestro y otros.
–Se antoja difícil el tránsito del estado en los siguientes años.
–Con todo, hay que ver siempre hacia adelante. Hemos aprendido del pasado reciente y los importantes avances en la reconstrucción de la administración pública estatal registrados en el primer año nos dan fuerza y confianza. Hay que trabajar mucho y ver más allá de un sexenio.