Hacia 2012, se debe agotar la lucha electoral y social para sacar al país adelante y no ir a otras formas de lucha que, como ha enseñado la historia, son dolorosas, afirmó el secretario de Trabajo y Fomento al Empleo, Benito Mirón, aunque reconoció que no hemos sabido integrar las diversas formas de lucha para aprovecharlas por el bien de las personas.

Al participar en la mesa redonda Los movimientos sociales en México a 31 años de lucha, consideró que para poner fin a la explotación, la marginación y la represión contra el pueblo mexicano deben tomarse en cuenta las experiencias surgidas de tres momentos históricos: los fraudes electorales de 1988 y 2006 y el surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, en 1994.

El actual modelo económico que asumen y pretenden perpetuar los políticos neoliberales es la causa de la descomposición que en diversos aspectos sufre el pueblo. Los que nos han gobernado tienen una culpa muy grande, pero ellos están en lo suyo, y la reflexión entonces es: ¿nosotros estamos en lo nuestro? Ésa es la pregunta. ¿Dónde está nuestra culpabilidad de que prevalezca esta adversa situación?

Se dice, comentó, que los pueblos tienen los gobiernos que merecen, pero en México no es aplicable esa frase, pues el nuestro ha hecho muchas cosas y ha perdido muchas vidas, aunque no hemos sabido tomar el poder, no hemos sabido integrar las diferentes formas de lucha para el bien de las personas, y sólo lo haremos agotando la lucha electoral.

Camilo Valenzuela, luchador social y fundador del PRD, señaló que tres décadas de políticas privatizadoras y empobrecedoras han implicado un retroceso histórico en México, sobre todo en materia laboral, pues se han arrebatado los derechos de los trabajadores y elevado la explotación en sus fuentes de empleo.

La creación de un frente patriótico por la paz podría ser una alternativa para enfrentar a quienes defienden a ultranza al gran capital nacional y trasnacional, ya que de lo contrario contaremos los 40 años de un modelo económico que tanto daño ha causado al pueblo mexicano.