La expectativa para México es que al cumplirse el primer cuarto de este siglo comience a ser un país envejecido y por tanto las demencias, como el Alzheimer, se conviertan en un problema de salud pública. Sin embargo, el país no cuenta con una política de salud ni con recursos específicos para atender a estos pacientes, los cuales cada vez serán más numerosos, advirtieron expertos en tema.

Durante la presentación de la nueva versión del Manual práctico del cuidador del paciente con la enfermedad de Alzheimer, David Resnikoff, experto en sicogeriatría y en siquiatría por la Universidad de Londres, lamentó que el programa que preparó durante aproximadamente dos años para instaurar una política pública en el rubro haya quedado archivado durante la anterior administración federal y siga en las mismas condiciones en la actual.

En entrevista el también médico cirujano señaló que, pese a que el país se enfrenta al envejecimiento poblacional, “el sector salud no hace lo necesario para atender las demencias, de las cuales la más común es el Alzheimer. En el sexenio pasado hice un programa de trabajo a nivel nacional y en la Secretaría de Salud nos dijeron que para aplicarlo consiguiera el dinero, ‘porque no tenemos’, por lo que permanece archivado”.

Resaltó que en otros países sí existen políticas públicas para atender estos males, pero lo más importante es educar y sobre todo concientizar a la sociedad para que exija a los gobernantes establecer esquemas que atiendan a este sector.

Indicó que en México no existen cifras exactas respecto a cuántas personas padecen el mal, pero conforme a estudios epidemiológicos y encuestas, así como con relación a prevalencias mundiales, podemos decir que tenemos en demencias poco más de un millón de pacientes, y quizás el Alzheimer represente poco menos de 900 mil.

Alto costo para las familias

Al repecto, el sicólogo Gabriel López Robles, director de enseñanza de la Fundación Alzheimer Alguien con quien contar IAP, indicó que, de acuerdo con datos del Conapo, en 2008 se habían contabilizado más de 600 mil casos, y en la actualidad existe dificultad para el diagnóstico y el acceso a servicios médicos. Por ello en el país la mayoría de los enfermos son atendidos por sus familias por lo que es prioritario brindarles apoyo constante en cuanto a diagnóstico, atención médica y capacitación para el cuidado.

Resnikoff indicó que no existe una cuantificación de los gastos en que incurren las familias, pero un referente podría ser Estados Unidos, donde un año de atención cuesta de 40 mil a 50 mil dólares al año por cada paciente, en cuidados y medicinas, pero en esto no se cuentan las pérdidas que experimentan los familiares, pues deben dejar sus actividades habituales e incluso sus trabajos para dedicarse al cuidado del enfermo.

El Alzheimer es una enfermedad progresiva y degenerativa del cerebro que provoca deterioro de la memoria, el pensamiento y la conducta, debido a que se interrumpe la comunicación entre las neuronas.