Tras admitir conscientemente que México no ayuda suficientemente a los deportistas que se requieren cada vez más altos, el presidente Felipe Calderón pidió a los seleccionados que competirán en los Juegos Panamericanos de Guadalajara ganar medallas para dar alegría a un país que sufre mucho, en algunos casos por culpa de verdaderos maleantes, de gente sin alma, y en otros por las turbulencias que se viven en el mundo, las crisis económicas, los problemas.

El jefe del Ejecutivo sugirió a los deportistas estar tranquilos y lejos de presiones de toda índole para que ejecuten lo que saben hacer, porque está seguro de que lo que han dedicado en años de esfuerzo y sacrificio en cada una de sus disciplinas tendrá los resultados de un México ganador en la justa continental que se realizará en octubre.

En un acto inusual, en el que conjuntaron a las dos delegaciones del deporte convencional como adaptado para la llamada Fiesta de América, Calderón abanderó al numeroso contingente, en el que los de a pie tuvieron al arquero Juan René Serrano como portador del lábaro patrio, y la halterista Patricia Barcenas, de sillas sobre ruedas, fue la encargada por los atletas de capacidades diferentes.

Durante su discurso, interrumpido en varias ocasiones por los aplausos de los asistentes, el primer mandatario hizo énfasis en que hace un par de meses abanderó a un grupo de jóvenes, en la Residencia oficial de Los Pinos, que iban a un campeonato con mentalidad triunfadora, el cual se tradujo con el título de la Sub-17 en el Mundial de futbol.

“Tengan la certeza de lo mucho que valen y además el plus, el fua, los …. iba a decir otra cosa”, dijo sonriente mientras todos comprendían la alusión y contestaban con carcajadas y lanzando ovaciones, por lo que no se atrevió a decirlo en público.

Al referirse al compromiso en puerta, no dudó en que México tiene a su mejor delegación conformada por medallistas olímpicos y mundiales y, como lo dijo Bernardo (de la Garza), será el equipo que más medallas obtendrá en su historia.

La Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte tiene como meta mejorar las 23 doradas y 80 en total para mantener el quinto lugar general.

Presente en el acto, al que no asistió el dirigente de la Organización Deportiva Panamericana, Mario Vázquez Raña, el gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, se levantó de su silla por invitación de Calderón para compartir el micrófono y dirigirse halagos mutuos.

Mencionó que en la entidad han surgido figuras como “Chicharito, Checo Pérez y, aunque no en la especialidad, está nuestra miss Universo, Jimena Navarrete”, así como los 10 campeonatos en la Olimpiada Nacional.

Luego de romper su concentración en Colorado Springs, Vanessa Zambotti, campeona continental de judo, instó a sus compañeros a encender la pasión, trasmitir energía al pueblo de México y demostrar que somos más los que queremos un país triunfador y ganador.

En tanto, el medallista paralímpico en natación, Juan Ignacio Reyes, agradeció el honor de que por primera ocasión fue abanderado con los deportistas convencionales, como muestra de igualdad y de un solo equipo unido.

Al final Calderón saludó de mano a los atletas, aunque su atención estuvo más con los convencionales, mientras los de silla de ruedas, débiles visuales y con parálisis cerebral esperaban impacientes tomarse la foto con el anfitrión, después la larga espera de una tempranera mañana fría y lluviosa en La Hondonada.