El empate a un gol entre Cruz Azul y Chivas dejó a casi todos contentos. Ambos equipos se mantienen entre los punteros del certamen y tras la contienda, los técnicos José Luis Güero Real y Enrique Ojitos Meza externaron su satisfacción por el resultado. La afición no desentonó y a la salida entrecruzaron porras hacia sus respectivos conjuntos.

Las anotaciones fueron marcadas por Omar Arellano al minuto 34 y La Máquina igualó al 62 por conducto de Edixon Perea. Cementeros y rojiblancos llegaron a 18 puntos en la tabla general después de 10 fechas.

Luego del intercambio de saludos, cuando Meza fue a estrechar las manos del Güero Real y a los demás rojiblancos, y tras los rezos de Marco Fabián –de hinojos en el centro del campo, al estilo del Chicharito Hernández– arrancaron las hostilidades con explosivo ritmo de parte de los visitantes.

Las Chivas suplieron su inexperiencia con enjundia, velocidad y amor propio. Aceleraron de manera vertiginosa mientras que el Cruz Azul se perdió durante varios minutos, sufrió por numerosos robos de balón, cedió un par de tiros de esquina hasta que de tanto corretear a los rojiblancos comenzó a dar señales de vida.

Los aficionados del Guadalajara –mayoría en el inmueble– se animaron ante el derroche de su equipo y estallaron con el grito de ¡Chivas, Chivas!, pero poco a poco La Máquina se involucró hasta lograr nivelar. El zaguero Héctor Reynoso lució con buenas intervenciones y desvió tiros con firma de gol.

En un contragolpe las Chivas inauguraron el tablero. Los rezos de Fabián se tejieron con su talento cuando emprendió la descolgada y sirvió hacia Arellano, quien coronó su gran sprint con remate cruzado, exacto, que sacudió las mallas para el 0-1.

Arellano hizo otra descolgada, pero su centro resultó más bien un balazo en la frente para su compañero, el desprevenido Venado Medina, quien cayó al suelo tras el fuerte impacto.

Para el complemento, Ojitos Meza no sólo recurrió a su movimiento favorito, el ingreso de Javier Aquino, sino que lo hizo acompañar del Chuletita Orozco, y sacó a Gerardo Flores e Israel Castro. Aquino comenzó a hacer estragos por el costado derecho y en cuestión de ocho minutos provocó la expulsión de Miguel Ponce (52), por cometerle dos faltas de tarjeta amarilla.

Cruz Azul ya era amo y señor del partido y no tardó en lograr el empate, luego de la anulación de un gol por fuera de lugar a Orozco y de otra providencial salida de Michel, quien desvió un nuevo envío del Chuletita.

El Chaco Giménez, quien destacó en el primer tiempo en labores defensivas y de sacrificio, dio gran servicio al centro, al minuto 62, donde Edixon brincó para clavar el balón ante un aniquilado Michel que se quedó inmóvil.

El Güero Real repasó con la mirada a su banca de reserva y sólo encontró a Carlos Fierro, campeón del mundo Sub-17, quien entró al minuto 63 en lugar del desgastado Arellano. Meza redondeó sus movimientos con el ingreso de Hugo Droguett, quien suplió a César Villaluz.

Javier Chuletita Orozco está tan peleado con el gol que hasta le anularon un tanto legítimo al minuto 78, cuando con tiro cruzado venció a Michel, pero el juez de línea Alfredo López alzó el banderín por supuesta posición adelantada.

En el contragolpe, Fierro, quien ya traía pleito casado con Pinto, soltó un riflazo que pasó zumbando el poste izquierdo de la portería de Jesús Corona, y como colofón hubo un par de tiros del aguerrido Chaco Giménez.

Real manifestó que cuando estuvieron completos el juego fue parejo, pero ya en inferioridad numérica resultó complicado por la calidad del rival, que es de lo mejor que hay en México, y ya no hubo oportunidad de estar con el ida y vuelta. Pero nos defendimos bien y en general no hubo una jugada donde se plantara uno solo frente a Michel.

Meza indicó: El volumen de juego mejoró y eso me tiene contento, hubo dominio y terminamos las jugadas; mal (no en gol), pero las terminamos. Estamos en los primeros lugares y mejoramos futbolísticamente y en actitud, colectivamente se hizo gran partido, porque el rival era peligroso por su velocidad y técnicamente es muy bueno.