Tijuana BC, 2 de octubre. Después de seis partidos en el estadio Caliente, Tijuana continúa sin ganar en casa. El equipo fronterizo igualó 1-1 ante Tigres, con lo que suma tres derrotas y tres empates, y esta vez se salvó de la caída por el gol que anotó Javier Gandolfi, al minuto 88.

Los Xolos siguen en su camino de regreso a la Liga de Ascenso tras acumular siete partidos al hilo sin ganar y con sólo una victoria en 11 jornadas. Ocupan el sitio 17 en la tabla de la clasificación general (con ocho puntos) y se mantienen en el sótano de la tabla de cocientes.

El técnico Antonio Mohamed lleva dos empates seguidos, luego de su presentación ante el América, con igual marcador.

Por su parte, el conjunto de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) se ubica en el tercer sitio, con 18 unidades, y junto a Toluca es el equipo con más empates en la campaña (seis).

Urgido de un triunfo como local, Tijuana se lanzó al frente desde el inicio y apenas a los 45 segundos se acercó al gol, tras un buen centro de Fernando Arce y cabezazo de José Sand que el portero Enrique Palos controló con el pie derecho, a un metro de la línea de gol.

Después el que generó peligro fue el colombiano Dayro Moreno, en un tiro que Palos detuvo luego de un bote peligroso sobre la cancha sintética del inmueble.

Eso fue todo para el equipo de Mohamed, ya que Tigres hizo valer sus individualidades, comandadas por Lucas Lobos, y dominó el cotejo. Se acercó con disparos del propio Lobos, Damián Álvarez y Juninho, que hicieron trabajar al portero Cirilo Saucedo.

Al minuto 36 se presentó una jugada polémica, ya que en un tiro libre el chileno Héctor Mancilla detuvo el disparo con la mano extendida, pero el silbante Erim Ramírez no marcó el penal que exigían los de casa.

Cuatro minutos después, el equipo de Ricardo Ferretti se adelantó en el marcador. Damián Álvarez, quien había tenido bajo rendimiento, desbordó por el sector izquierdo y envió un centro que Lobos controló y sin marca, anotó con tiro rasante para vencer a Saucedo. La anotación fue un premio para el argentino, quien ofreció un buen primer tiempo.

Los Xolos igualmente se mostraron bien en el inicio del complemento, sobre todo con un par de cabezazos de Raúl Enríquez, pero el que se ganó los aplausos fue Lobos, quien en veloz carrera punteó un esférico que Dayro Moreno se aprestaba a mandar a las redes.

Con más entrega que buen futbol, el cuadro fronterizo mantuvo el dominio y les anularon correctamente un gol por fuera de lugar de Moreno. Después, el que se vio en gran nivel fue el portero Palos, quien en gran lance desvió un tiro de Arce que iba al ángulo superior izquierdo.

Sin embargo, Tigres fue peligroso al contragolpe. Primero, en una jugada que Danilinho se tardó en disparar y de atrás llegó Javier Yacuzzi para puntear el balón, y después, en tiro de Alan Pulido que el mismo argentino salvó en oportuna barrida.

Pulido, quien ingresó por Mancilla, sumó dos fallas que evitaron la victoria de su escuadra: al minuto 73, en un cabezazo al travesaño cuando estaba sin marca, y al 85 en un contragolpe que no pudo definir y entregó el balón ante la salida de Saucedo.

A dos minutos del final llegó el 1-1. En un tiro libre de atrás llegó el capitán Gandolfi y levantó la pierna derecha ante la precipitada salida de Palos y mandó el balón a las redes, mientras la zaga felina se quedó estática.

El uruguayo Egidio Arévalo estuvo cerca de conseguir el triunfo, ya en la compensación, en un tiro potente que pasó cerca del poste derecho.

Este encuentro presentó una página más para los anales del futbol mexicano, ya que registró la presencia de dos hermanos en la misma cancha, Armando Pulido (Xolos) y Alan Pulido (Tigres).