Acapulco, Gro., 6 de octubre. Integrantes del magisterio de Acapulco y Coyuca de Benítez criticaron al gobierno estatal por minimizar la tercera movilización efectuada en la Costera Miguel Alemán el pasado 5 de octubre, en protesta por la alta incidencia en secuestros, extorsiones y robo de vehículos contra el gremio, y en la que participaron 4 mil personas.

Los maestros en paro informaron que buscarán llevar el caso de la inseguridad en Acapulco a organismos internacionales, pues criticaron que después de la primera marcha de los docentes, efectuada el 14 de septiembre pasado, no ha habido diálogo del gobierno estatal con la verdadera base magisterial.

Recriminaron que el gobierno del estado ha manejado que el movimiento es minoritario y queremos decirle a los gobiernos estatal, municipal y federal, que están obligados como funcionarios a escuchar a las mayorías y a las minorías.

Preguntaron: “¿Cómo decirle al gobernador que los afectados somos los que seguimos aquí, los que sufrimos levantones, los que conseguimos los 20 mil o 30 mil pesos para aportar?”. Los mentores señalaron que algunos que aceptaron el acuerdo firmado el pasado 29 de septiembre están regresando al paro.

“No soportamos esta situación. Estamos luchando por familiares de nuestros alumnos, por la sociedad. La inseguridad no ha disminuido. A algunos compañeros que decidieron retornar ya les fueron a hacer la visita, y ese es nuestro temor”, expresaron los mentores.

Criticaron lo expuesto por el vocero estatal, Arturo Núñez Arana, quien declaró en días pasados que 95 por ciento de mil 270 escuelas en el municipio ya estaban operando y que se dialogaría con los inconformes porque no había razón para que continuaran sin trabajar.

Sin precisar cifras, aseguraron que 60 por ciento de los maestros de base en el municipio están inconformes con reanudar actividades debido al clima de inseguridad, lo que representa unos 4 mil 500 mentores.

Explicaron que algunos ya regresaron a las aulas, donde se llevan a cabo encuentros informativos con padres de estudiantes y entregaron guías de trabajo a los alumnos, pero el temor de reanudar actividades se mantiene.

Por su parte, autoridades estatales y representantes de la Federación Médica en Guerrero, organismo que reúne a 2 mil 500 galenos y 32 organizaciones, firmaron un acuerdo para implementar estrategias de seguridad en hospitales del sector salud estatal, las cuales comenzarán en un tiempo no mayor a 15 días.

El presidente de la Federación Médica de Guerrero, Roberto Martínez de Pinillos, aceptó que debido a la violencia en Tierra Caliente 30 profesionales abandonaron la región y tres se fueron de Acapulco debido a que las normas de control y vigilancia se relajaron, por lo que urge regresar a la disciplina.

Descartó irrupciones armadas en nosocomios de la entidad para llevarse a heridos por impactos de bala en enfrentamientos, aunque trabajadores del Hospital General Donato G. Alarcón y Renacimiento, en Acapulco, han dado a conocer varios casos en meses pasados.

Indicó que ambos hospitales requieren atención prioritaria, así como los de Coyuca de Catalán, en la Tierra Caliente; el de Zihuatanejo, en la región de Costa Grande, y el de Tlapa, en la Montaña.

Expresó que el plan de seguridad será acordado entre representantes de sindicatos, directores de hospitales y autoridades estatales, quienes definirán la colocación de cámaras en las diferentes áreas de atención, además de que se implementarán lectores biométricos para el ingreso de trabajadores.