Con el reto a vencer de superar 67.24 por ciento de participación que se obtuvo en la elección de jefe de Gobierno de 2006, el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) declaró ayer formalmente el comienzo del proceso electoral 2011-2012.

Consejeros electorales y representantes de los partidos políticos asumieron, además, el desafío de revertir la falta de motivación de los jóvenes, quienes representan 26 por ciento del listado nominal, para que participen activamente en el proceso electivo, no sólo mediante el ejercicio del voto.

En su mensaje, el presidente del órgano electoral, Gustavo Anzaldo, lamentó que la relevancia que debía tener el arranque del proceso electoral se vea disminuida por el ambiente que priva en la ciudad de unos días para acá, en alusión a la excesiva publicidad de funcionarios, legisladores, militantes y ciudadanos que aspiran a la jefatura de Gobierno.

Deploró, además, las descalificaciones anticipadas contra la actuación del IEDF. Apuntó que si bien no se pide confianza ciega en los trabajos de la institución, al menos sí debe haber prudencia para evitar juicios ligeros que en nada contribuyen al régimen democrático, y recordó que las decisiones se impugnan y substancian con los mecanismos y normas diseñados por los mismos partidos mediante sus legisladores.

Fue un anticipo al reclamo del representante del PAN, Juan Dueñas, quien consideró al IEDF como una autoridad carente de credibilidad y reconocimiento ante la ciudadanía, por no impedir el despliegue de la antedicha publicidad, además de que es incapaz de defender su autonomía ante el gobierno central, por no ir más allá en su petición de ampliación presupuestal.

Al reclamo respondió el consejero Néstor Vargas: qué bueno que se hable fuerte, pero no porque se hable fuerte se posee la verdad, y defendió en su mensaje la posibilidad de utilizar Internet para el voto de los ciudadanos del DF que viven en el extranjero, que fue impugnado por el PAN.

El priísta Marco Michel cuestionó también la publicidad con la que se promocionan algunos funcionarios del gobierno central, pero se enfocó en criticar los pronunciamiento del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, contra el ex gobernador mexiquense Enrique Peña, así como su actitud intervencionista en la vida interna de los partidos y hablo del nuestro en particular.

El perredista Miguel Ángel Vásquez dijo que a diferencia del IFE, no ve un instituto mocho y aquejumbrado, y espera que sea un árbitro imparcial, legal y fuerte en la toma de decisiones, aun cuando no nos beneficien.

Hizo un llamado a los jóvenes a participar, sobre todo a quienes podrán ejercer por primera vez su voto, “la indignación –apuntó– no nada más es mediante la movilización, sino por medio del ejercicio del voto razonado”.