Elogian ONG la iniciativa promulgada por el gobernador de California
Miércoles 12 de octubre de 2011, p. 26
San Diego, 11 de octubre. El gobernador de California, Jerry Brown, firmó una nueva legislación que prohíbe desde ahora a las agencias policiacas confiscar vehículos a conductores indocumentados porque carecen de licencia.
La ley AB353 señala que los retenes que llevan a cabo policías y alguaciles para identificar a conductores ebrios deben concentrarse en esa tarea, en encontrar alcoholizados, no en confiscar vehículos a indocumentados, a quienes el estado californiano niega licencias de conducir.
De acuerdo con una investigación de la Universidad de California en Berkeley, el año pasado las autoridades policiacas recogieron más de 12 mil vehículos a conductores indocumentados que carecían de licencia.
A diferencia de los conductores que residen legalmente y los ciudadanos, al no tener licencia los migrantes no pueden ni rescatar sus vehículos, que acumulan deuda de 30 días de custodia o corralón antes de rematarse, ni pagar multas por carecer de licencia.
La ley que firmó el gobernador Brown establece que si la policía encuentra en un retén a un conductor indocumentado sin licencia, simplemente debe orillar al chofer y esperar a que algún conocido suyo que tenga licencia de conducir vehículos se presente para llevarlo a su destino.
El Consorcio de los Derechos de los Migrantes en San Diego, que aglutina a unas 25 organizaciones, elogió la nueva ley, que ayudará principalmente a las familias trabajadoras.
La investigación de la Universidad de California en Berkeley apunta que el año pasado las diversas agencias del orden que establecen retenes sorpresivos en avenidas y carreteras recogieron más de 17 mil vehículos.
De ese total, unos 5 mil correspondieron a conductores que manejaban alcoholizados o bajo efectos de las drogas, pero más de 12 mil fueron de migrantes.
Los vehículos recogidos a indocumentados generalmente eran rematados a beneficio de empresas de remolques o grúas.