Tel Aviv, 27 de octubre. Egipto liberó hoy al presunto espía estadunidense-israelí Ilan Grapel, detenido en El Cairo hace cuatro meses por presunto espionaje, como parte de un canje de prisioneros mediado por Estados Unidos que también permitió el regreso a su país de 25 egipcios detenidos en Israel, entre ellos tres menores de edad.

Tras ser entregado en el paso fronterizo de Taba, Grapel, de 27 años, voló en un jet privado directamente hacia el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv acompañado de dos enviados designados por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyah, para encontrarse con su madre.

Grapel fue arrestado en Egipto en junio pasado imputado de ser un agente del Mosad, el servicio secreto israelí, y se le acusó de presunto reclutamiento de agentes y de espiar durante la revuelta que derrocó al presidente Hosni Mubarak.

Israel negó que Grapel, que emigró de Nueva York en 2005 y resultó herido en la guerra contra Líbano un año después, fuera un espía. El joven estudiante de abogacía en Estados Unidos, trabajaba para el Servicio de Refugiados Saint Andrew, una agencia no gubernamental, cuando fue detenido.

Washington había reclamado la liberación de Grapel, y la medida se concretó tres semanas después de que el secretario de Defensa estadunidense, Leon Panetta, visitó ese país.

Previamente, 25 prisioneros egipcios fueron trasladados de Israel a Egipto por Taba, en la península del Sinaí. Algunos besaron el suelo al pasar al lado egipcio.

Los egipcios liberados, entre ellos tres adolescentes de 15 y 16 años, fueron condenados por tráfico de droga, infiltración en Israel y contrabando de armas, informó el servicio penitenciario israelí.

El acuerdo de intercambio se logró poco después del negociado por Egipto entre Israel y el grupo islamita palestino Hamas.