La jalisciense Edna Carrillo se fue con las manos vacías
Domingo 30 de octubre de 2011, p. a17
Guadalajara, 29 de octubre de 2011. La selección mexicana de judo se despidió de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011 con una medalla de plata.
Con una tribuna volcada en su apoyo, que contó con la presencia de Margarita Zavala, Nabor Castillo no pudo dar la sorpresa en la final ante el brasileño Felipe Kitadai, quien se confirmó como el numero uno de América en 60 kilogramos.
En la final, Kitadai derrotó al mexicano –número dos del continente– por un ippon y un yuko, ante la frustración de un público que esperaba escuchar el Himno Nacional.
No me voy muy satisfecho, venía por el oro, venía a escuchar el Himno Nacional y repetir el campeonato panamericano; no se me dio, perdí con el brasileño la final, pero me llevo algo de estos juegos para seguir trabajando
, refirió el hidalguense.
“Era muy difícil, el brasileño estaba muy bien rankeado, es el mejor de América, yo soy el que le sigue, fue una pelea muy dura, me sorprendió, así es esto, un error y un acierto del otro es lo que te cuesta el combate”, añadió.
Edna Carrillo se quedó al margen del bronce de 48 kilogramos al ser vencida por la estadunidense Angela Woosley, en el repechaje.
La tapatía –medallista de bronce en el Panamericano de la especialidad– con visible frustración terminó el combate. Con el rostro desencajado se tiró al tatami, incrédula de su derrota.
“Yo soy mucho mejor que ella, la verdad es que me cansé muy rápido de las piernas, no sé qué pasó, no me reaccionaban muy bien, pero hay que seguir entrenando, tengo que fortalecer las piernas.
Estoy muy triste, un poco decepcionada, pero hice mi mayor esfuerzo; espero que vengan muchas más oportunidades y poder conseguir esa medalla de Juegos Panamericanos algún día
, expresó la jalisciense, quien fue campeona centroamericana en Mayaguez 2010.
El equipo mexicano de judo conquistó un total de cinco medallas (dos doradas y tres bronces).