El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2012 no se politizará y será reorientado a la atención de las áreas más vulnerables del país como salud, educación, cultura y campo, sostuvo el presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, Alfonso Navarrete Prida.

En entrevista con este diario, anunció que el órgano legislativo recibió de los gobiernos de los estados de la República, universidades públicas, sindicatos y de distintos grupos sociales, peticiones de recursos extras y reorientación del gasto por más de 600 mil millones de pesos.

Lo que debemos ver exactamente es cuáles son las prioridades, qué podemos solucionar. Las partes más vulnerables de la sociedad que requieren atención inmediata del presupuesto como son educación, salud, desarrollo social, cultura, deporte, el campo. Son temas que requieren tener respuesta inmediata, lo mismo lo relacionado a infraestructura, en la medida que alcance.

–¿Se podrán satisfacer todas las solicitudes?

–Muchas van a quedar sin responder y eso es lo que sucede cada año, yo creo que esto nos demuestra que el país necesita aumentar su capacidad de captación de recursos, para poder satisfacer las grandes demandas. Tenemos que hacer un gran esfuerzo todos los mexicanos para aportar los recursos que se requieran, fiscales, tributarios y no tributarios, y que podamos, en la medida en que crezca nuestra economía, satisfacer nuestras necesidades, retratadas en las que han presentado las entidades que son todas legítimas.

–¿Se pretendería inicialmente una reforma hacendaria?

–Urge una reforma hacendaria pero ese es apenas un buen propósito, y lo que tenemos ahora es una realidad, de ver hasta dónde podemos reasignar gasto entendiendo que es una cámara plural, y que la pluralidad llegue a acuerdos y que en esa medida nosotros trataremos de responder este año. Lo ideal para el país es aprobar una reforma hacendaria que sea de fondo, cambiar los coeficientes de impacto que en este momento tienen los distintos rubros, tanto tributarios como no tributarios, que le permitieran al país crecer.

–¿Será un presupuesto partidizado el de 2012?

–Es imposible, porque los presupuestos salen de acuerdos tomados por los grupos parlamentarios, sean grandes o chicos, y desde ese punto de vista garantizaremos que sea un presupuesto equilibrado, responsable, que le responda a la gente en sus necesidades más apremiantes, y eso no tiene nada que ver con partidos políticos sino con necesidades.

El presupuesto siempre será perseguido por la sombra de la politización y de la partidización en víspera de un año electoral, pero trataremos todos de hacer un esfuerzo para que esto no suceda y hacer un presupuesto equilibrado que responda a las necesidades de la gente, independientemente de que sea un año electoral.

–¿Cuáles son los temas en los que habrá de reorientarse el gasto?

–En materia de campo, salud, educación, desarrollo social, fondos compensatorios y fondos metropolitanos, en apoyo a grupos vulnerables, y equidad de género, esos son temas en los que se merece hacer una reorientación.

–Desde hace dos años la presión de los diputados que representan al campo ha provocado una crisis severa en la negociación del gasto –se le dijo.

–No sé si vaya a haber una posición de endurecimiento, pero como todos los años el presupuesto del campo se resolverá, y todos votaremos en consenso mayoritario de las fuerzas partidistas.

–En el ámbito de la educación, ¿qué se puede esperar?

–Las universidades públicas han demandado 18 mil millones de pesos, pero esto tendremos que verlo primero con las opiniones que nos manden las comisiones de los sectores, que tienen a su cargo esa responsabilidad y veremos qué tanto tienen a su cargo, y cómo pueden reorientar el gasto.

–¿A qué apela del resto de las fuerzas políticas ?

–Espero que lo hagamos con mucha responsabilidad y pensando en los mejores intereses del país, y si pensamos en eso seguramente vamos a tener grandes coincidencias. La ley explica y dice que el presupuesto deberá ser aprobado el 15 de noviembre, vamos a hacer el esfuerzo para cumplir con lo que es una negociación legal, que no está sujeta a negociación, sino que está sujeta a su cumplimiento.