Londres, 2 de noviembre. Un examen hogareño del cáncer de cuello de útero podría ayudar a prevenir miles de casos de la enfermedad en las mujeres que no tienen acceso sencillo y regular al Papanicolau, dijeron el miércoles científicos.

La prueba casera, que detecta el virus del papiloma humano (VPH), causante de gran parte de los casos de cáncer cervicouterino, fue ampliamente aceptado en un ensayo con 20 mil mexicanas y fue más efectivo que el Papanicolau tradicional para detectar signos tumorales tempranos.

Investigadores británicos que ayudaron a crear el examen y dirigieron el ensayo indicaron que los resultados, publicados en la revista médica The Lancet, sugieren que el kit hogareño tiene el potencial de ayudar a miles de mujeres que viven en países donde el Papanicolau es difícil o imposible de aplicar.

Los Papanicolau o Pap son realizados por una enfermera o médico y controlados manualmente por un citólogo que emite un juicio luego de examinar una muestra bajo un microscopio.

La prueba hogareña puede ser realizada por cualquier persona en su casa y la muestra luego es evaluada por un sistema automático.

El cáncer de cérvix o cuello uterino es el segundo más común entre las mujeres en todo el mundo, con alrededor de 500 mil nuevos casos y unas 250 mil muertes anuales, según datos de la Organización Mundial de la Salud.

Infección más común

Prácticamente todos los cánceres cervicouterinos están relacionados con el VPH, la infección viral más común del sistema reproductivo.

El cáncer de cuello de útero es más común y letal en los países donde las mujeres no tienen acceso a controles, lo que implica que los casos suelen detectarse demasiado tarde como para que el tratamiento funcione. Un estudio de la Universidad de Washington reveló en septiembre que tanto los casos como las muertes por cáncer de mama y cervicouterino están aumentando en muchos países, especialmente en las naciones más pobres donde las mujeres fallecen a edades más jóvenes.

En los países más ricos, los programas de control uterino llevan muchos años y, más recientemente, se han desarrollado campañas nacionales de inmunización para proteger a las niñas del VPH por medio de las vacunas de Merck y GlaxoSmithKline.

A diferencia de muchas formas de enfermedad, podemos prevenir realmente el cáncer cervicouterino, pero sólo si las mujeres tienen acceso a controles o si las niñas jóvenes son vacunadas contra el virus, indicó en un comunicado Attila Lorincz, profesor de epidemiología molecular de la Universidad de Londres, quien trabajó en el ensayo de la prueba hogareña.

En el estudio efectuado en México, casi la mitad de las 20 mil voluntarias se realizaron el examen hogareño, mientras la otra mitad asistió a clínicas para someterse a las pruebas de Papanicolau y colposcopía.

Los resultados mostraron que el examen hogareño detectó cuatro veces más casos de cáncer cervicouterino y más del triple de casos de la condición precancerosa llamada neoplasia intraepitelial cérvica, que puede tratarse para prevenir el desarrollo de la enfermedad.

Además, la aceptación de la prueba hogareña fue mayor que la del Pap, dijo Lorincz, lo que sugiere que las mujeres prefieren este tipo de control.

Nuestros hallazgos muestran que las mujeres están contentas con realizarse el examen y que es muy sensible para detectar los casos en riesgo de desarrollar cáncer, indicó.

El equipo de investigación señaló que la prueba aún tiene limitaciones. Por ejemplo, suele producir más de los llamados falsos positivos, es decir que detecta problemas en mujeres saludables, lo que suma cargas a los servicios de atención médica. Los autores indicaron que se necesitan más estudios para solucionar el problema.