Si el gobierno federal quisiera terminar con los litigios en el sector de las telecomunicaciones podría adoptar tres medidas poco convencionales pero básicas, que consistirían en promover el uso compartido del espectro general, con límites para evitar interferencias; promover el uso efectivo de ese bien público, porque ahí está su verdadera generación de valor, y autorizar y promover el uso compartido de infraestructura, propuso el académico del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Enrique Melrose. En una colaboración para la consultoría The Competitive Intelligence Unit (The-CIU), Melrose señaló que la litigiosidad que priva en el sector de las telecomunicaciones y las condiciones regulatorias no permite aprovechar el enorme potencial del espectro radioeléctrico con el que cuenta México y no se puede seguir desperdiciando. La propuesta de Melrose incluye autorizar el uso compartido de infraestructura, sitios, torres, antenas, entre otros, lo que incluiría la aportación e intercambio de segmentos de espectro extendiendo en lo posible el concepto de consorcios de operadores para prestar servicios inalámbricos a nivel regional o en zonas de difícil cobertura, algo como lo que ocurre con la fibra óptica.