Ordenan a Txapote indemnizar con 500 mil euros a deudos de fallecidos
Martes 8 de noviembre de 2011, p. 26
Madrid, 7 de noviembre. Francisco Javier García Gaztelu, el ex jefe militar de la organización armada vasca ETA, fue condenado hoy a 105 años de cárcel por haber ordenado el asesinato del dirigente socialista Fernado Buesa y de su escolta, Jorge Díez, que murieron en un atentado con coche bomba el 22 de febrero de 2000.
García Gaztelu, también conocido por el alias de Txapote, fue condenado en base a datos incriminatorios indiciarios
. Los magistrados de la Audiencia Nacional concluyeron que el acusado , , en calidad de jefe de ETA, habría dado la orden de acción violenta, a pesar de que no hay ninguna prueba específica que así lo acredite.
El juicio contra García Gaztelu concluyó con una condena dictada por la Sección Cuarta de la Audiencia Nacional, cuya presidenta, la jueza Angela Murillo, se tuvo que apartar de otro proceso abierto contra el propio Txapote luego que caracterizó como cabrones
a los cinco miembros de ETA sentados en el banquillo.
La sentencia emitida hoy asegura que Txapote es culpable de dos delitos de asesinato terrorista, dos delitos de lesiones, uno de estragos terroristas y uno más de falsificación de documento oficial. El conjunto de las faltas cometidas suman 105 años de prisión, más una indemnización de 500 mil euros para las familias de las dos personas fallecidas en el atentado.
García Gaztelu ya fue condenado en 2006, también por el tribunal de la Audiencia Nacional, a 50 años de cárcel por el secuestro y asesinato del concejal Miguel Ángel Blanco, que murió a manos de un comando de ETA en julio de 1997. Esta nueva condena contra Txapote también es la primera que dicta un tribunal español desde que ETA decretó, el pasado 20 de octubre, el cese definitivo de la lucha armada, en un histórico comunicado que abrió las puertas a la resolución del histórico conflicto en el País Vasco y que fue apoyada de forma expresa por el colectivo de presos de ETA.
Los magistrados que condenaron a García Gaztelu concluyeron que una vez que la dirección de ETA decidió romper la tregua unilateral que había decretado en 1998, se ordenó al jefe militar que llevara a cabo diversos atentados. Y que habría sido el propio Txapote quien dio la orden de matar a Buesa al comando de ETA integrado por Ituren Asier Carrera Arenzana, Luis Mariñelarena Garciandía y Diego Ugarte López de Arcaute.
En la sentencia, los jueces advierten que la conclusión de la responsabilidad de Txapote en este crimen se encontró gracias a todo un elenco de datos incrimintorios indiciario
que ha desvirtuado su presunción de inocencia. Según la sala, aunque la autoría del acusado no es la directa y material
exigida por cada uno de los delitos por los que ha sido condenado, sí permite, bajo su cobijo, la autoría de los hechos con un control efectivo y eficaz de todos y cada uno de los pasos que debía llevar a cabo el comando, inspirando y sosteniendo a los ejecutores materiales
.