Los gobernadores de Chiapas, Juan Sabines, y de Oaxaca, Gabino Cué, así como el secretario de Gobernación, José Francisco Blake, acordaron intensificar los trabajos de diálogo y técnicos para distender y solucionar el conflicto de los Chimalapas, a través de la conciliación y con pleno respeto al estado de derecho y a la integridad y los derechos humanos de las personas.

Los tres funcionarios se reunieron el martes al mediodía en la sede de Bucareli, en donde dialogaron por más de tres horas sobre las disputas agrarias y de aprovechamiento forestal que sostienen comunidades de Chiapas y Oaxaca en la zona de los Chimalapas, ubicada en los límites de estas dos entidades.

Como primer acuerdo, decidieron establecer las medidas necesarias para la reconversión de las actividades forestales hasta hoy autorizadas al ejido Díaz Ordaz y a un par de congregaciones de la comunidad de San Miguel Chimalapa, de tal manera que se les compense de forma suficiente y razonable, pero que no sea obstáculo para la solución del conflicto agrario, informó Gobernación en un comunicado.

Agregó que los gobernadores y el titular de la política interior se comprometieron a incrementar los esfuerzos gubernamentales en materia de gasto social e infraestructura para acelerar la mejora en las condiciones de vida de la población en toda la zona.

A la reunión también asistió el secretario de la Reforma Agraria, Abelardo Escobar Prieto, quien sostuvo que en la zona de Chimalapas hay un conflicto grave, en el que se busca que no se llegue a la violencia, y existe desde hace muchos años en virtud de que hubo errores en las dotaciones de tierra.

El de los Chimalapas es un conflicto que data de hace 44 años. Escobar Prieto recordó que a unos 19 ejidos se les dotó la misma tierra.