La PGR los investiga por delitos contra la salud, señala Mancera
Miércoles 30 de noviembre de 2011, p. 39
Los supuestos actos de tortura cometidos contra algunos de los detenidos luego de la balacera del pasado 19 de noviembre entre presuntos narcomenudistas y policías capitalinos en Tepito tenían como propósito que los primeros dijeran a los uniformados quién había disparado contra el policía que resultó herido por impacto de bala en la cabeza.
Lo anterior, explicó el procurador Miguel Ángel Mancera Espinosa, fue lo que declararon ante el agente del Ministerio Público los afectados –quienes son investigados por las autoridades federales por delitos contra la salud–, algunos de los cuales dijeron ser boxeadores y que se encontraban en la vecindad de Tenochtitlán 21, para comprar drogas.
Entrevistado luego de poner en marcha el programa Alerta Amber para la localización de niños extraviados o sustraídos, dijo que, de los cinco policías arraigados por esos hechos, cuatro se reservaron su derecho a declarar, pero que se analiza de manera separada todo el material fotográfico con el fin determinar el grado de responsabilidad de cada uno de los presentados.